Televisión

Marcelo 'Chino' Ríos en su lado más íntimo habló su pasado y futuro en el programa 'De tú a tú'

El deportista abre las puertas de su casa para conversar “De tú a tú” en un capítulo que fue destacado por el público y muy comentado con el hashtag #DeTuaTuChinoRios que estuvo en los primeros lugares de los Trending Topics. 
viernes, 26 de marzo de 2021 · 10:57

Marcelo Chino Ríos en el programa De Tú a Tú, conducido por Martín Cárcamo mostró por primera vez en TV su vida en Sarasota, reveló sus grandes errores, habló de los matrimonios que reconoce y se refiere a su incierto futuro laboral.

Primero, Martín va hasta el gimnasio en donde Ríos se ejercita desde hace un año, todos los días, en un entrenamiento muy distinto al que hacía cuando practicaba Tenis. Ahí conversan con el entrenador del “Chino” y se pesaron.

Una vez en la casa del deportista, Marcelo cuenta que decidió quedarse en Sarasota, y no en otra ciudad de EE.UU, porque “me gustó este lugar y Miami no porque mucho latino. Traté, no sé si de escapar, pero estar más tranquilo”. Martín le pregunta si se sintió acosado. “Acá hay mucho chileno entonces era volver a lo mismo, y una de las razones por las que me fui de Chile es que me sentí un poco ahogado en Chile y necesitaba un poco de tranquilidad”. Dice que lo pensó mucho antes de tomar la decisión, y la casa en la que vive es de un amigo que se la arrienda. También cuenta que tiene vecinos famosos: Petr Korda, María Sharapova, Tommy Haas y Angus Young de AC/DC.

Afirma que trabaja poco. “Trato de disfrutar más tiempo con los niños. Tengo una empresa en Chile, y también estoy metido en unos negocios con unos amigos acá. Pero trato de hacer lo menos posible y trato de hacer más calidad que cantidad”. No coopera en la casa.

Asegura que ya no bebe porque la última vez lo llevaron preso, y ahí Martín le da la mano, recordando que a él también. Ríos dice que estuvo cuatro años sin tomar “y un día, estaba aburrido y me compré un litro de aguardiente, y pa’ dentro. El agua ardiente pega después de un ratito, es como el tequila. Fueron 12 o 13 shots. Para año nuevo no llegué a los fuegos artificiales. A las 10 ya estaba dormido. Y me lo tomé, y bien. Y de repente me fui a la chu***. Pero en la casa, tranquilo. Tomo poco porque me levanto temprano y por los niños. Al final lo paso mejor con los niños. Igual a veces una cerveza en la piscina. Pero cag* así como chocar, nunca me pasó nada. O que me pillen los pacos tampoco”.

Martín indaga si Ríos se ha mandado condoros con copete, él dice que se ha agarrado a combos pero sobrio también lo ha hecho.

Marcelo Chino Ríos en De tú a tú
Marcelo Chino Ríos en De tú a tú


Su infancia y sus inicios en el tenis


“No vengo de una familia millonaria, ni rica, ni nada de eso, como piensa la gente que yo siempre he vivido en cuna de oro. Papá ingeniero, mamá profesora. Si yo lo comparo con la realidad de mis hijos, es otra cosa. El computador no existía, no tenía todo tipo de juegos. Todo lo que me gané, me lo gané jugando, sacándome la cresta. No recibí una herencia, no recibí plata, yo me saqué la cresta".

"Todo lo que yo tengo es porque estuve desde los 8 hasta los 28 viajando, pasándolo bien o mal, aviones, hoteles. ¿Por qué llego a ese tema? Porque una de las razones de por qué me vine pa’ acá es porque en Chile se juzga mucho. Me juzgaban mucho. Si andas en mal auto, ‘put* que le está yendo mal’. Si andas en buen auto que es robado. Acá nadie se fija de nada".

"Nadie se fija si tienes buen auto, nadie se fija quién eres. Ellos (sus hijos) van a colegio público. El hijo del jardinero  es compañero de ellos, y lo encuentro increíble. Acá se ocupa el colegio público y es igual de bueno. No tiene una diferencia. Yo fui al Santiago College y lo pasé pésimo”.

Recuerda que en su época escolar, entraba muy temprano al colegio y salía tarde, y lo único que él quería era jugar tenis.

Comenzó a jugar tenis a los 8 años y fútbol, con eso salvaba el promedio. A los 14 años se salió del colegio para dedicarse de lleno al tenis. Su mamá se preocupaba de qué dirían sus amigas cuando se enteraran que su hijo no estudiaba.

En eso años, se creó el ASC (Athletic Study Center) y la mamá de uno de sus amigos era la dueña, por lo que entró a ese centro. Su papá le puso una meta: Tenía que quedar entre los 300 del mundo sino debía volver al colegio.

Al segundo año entre los 200 y al tercer año entre los 100. Al primer año quedó 99, segundo quedó 20 y al tercero fue Top Ten. Le dijo a su papá: “¡La hue* fácil! Me podrías haber puesto algo más difícil”.

“Lo mío fue todo muy rápido. Me hubiera encantado ser número 1 a los 28 años. Más maduro, sabiendo lo que pasa. Mi carrera fue demasiado corta y muy rápida. Me acuerdo que dije que cuando fuera número uno del tenis, me iba a retirar. Al final seguí jugando pero nunca me gustó la vida del tenista. Me encantaba jugar tenis, entrenar, sacarte la cresta, competir. Pero la vida que va detrás de eso, los hoteles, los viajes, hacer las maletas todas las semanas, andar solo a los 14 años en Japón”.

Y recuerda una gira en la que viajó solo, con contratos muy buenos para la época. Pero insiste en que esa vida no le gustaba. “Esa es una de las razones por las que me retiré a los 28 años. Ya estaba hecho, ya tenía la plata. También la época me jugó en contra porque yo digo, a los 26 años estás recién saliendo de la universidad y yo estaba listo, entonces ¿qué chu*** hago ahora?”.

Martín le muestra un video de su mamá. “Ella era la que estaba en todos lados. Era la que me llevaba a los torneos, a todos lados. Mi papá tenía que trabajar. A él no lo veía. Mi papá trabajaba toda la semana y los fines de semana jugaba golf y con raja lo veía los domingos en la tarde. Mi mamá era la que pasaba más conmigo. Mi papá me apoyó mucho en la parte económica, mi mamá me ayudó en lo que era llevarme a los torneos, esperarme”.

Y prosigue: “Yo no era un tipo alto como los que hay ahora. Creo que la preparación física que tuve no fue la adecuada. Tuve fractura por estrés en la espalda, tuve una hernia, después vino una pubalgia, luego me doblé el tobillo. Lo raro es que antes de ser número uno no tuve ninguna lesión. Llego a ser el número uno y me lesiono justo después de la Copa Davis en Buenos Aires”.

Y Marcelo le muestra a Martín su operación, lo que luego hizo que perdiera velocidad. Tiene pernos de portón en la espalda. Ese es un dolor que no se le ha quitado. En la cara, dice que se arregló la frente, los párpados, todo eso por culpa del sol.

Marcelo Chino Ríos en De tú a tú
Marcelo Chino Ríos en De tú a tú


 

El número 1 del mundo


Luego ven las imágenes de cuando se convirtió en el número 1 del mundo. El ex tenista afirma que le hizo mal llegar a ese lugar. “Cuando llego a ser número uno, y empiezo a ser más conocido, comienza a aparecer la farándula, aparecen las mentiras, y comienzan a meterse en mi vida, y lo que menos importaba era si ganaba un partido de tenis, importaba si el hue** había dejado alguna cag**a, o si había salido una noche. Me empezó a influir y lo tomé de una manera muy agresiva porque me molestó".

"No estaba preparado. En esa época era un hue*n chileno, pelo largo que me gustaba salir, que mi vida era de amigos, de asados. Y de repente me voy número uno del mundo y que no puedo hacer esta hu*á. Creo que no seguí las reglas, si es que las había. Nadie te enseña. Yo seguí mi vida. Era un dios en Chile, chico, con 21 años, pendejo, de un país que no tenía ídolos, de un país que nunca habíamos ganado ni una hu*á”.

Dentro del marco de esa conversación el “Chino” Ríos recuerda que, cuando fue a La Moneda, tuvo que convencer al Presidente Frei para que lo dejara salir al palco.


Política


Se define de derecha porque cuando él ha votado le ha tocado elegir “entre Piñera y Guillier, no voy a elegir Guillier si era periodista y los periodistas me caen mal”

Se muestran cuando Raquel Correa lo entrevistó y él responde que no le interesa la política. A raíz de esto, Martín lo cuestiona por su cambio de parecer y su participación ahora. “Creo que es una cuestión de madurez. Una cosa que vas creciendo y te vas interesando en el país, en la gente que está gobernando tu país”

Marcelo Chino Ríos en De tú a tú
Marcelo Chino Ríos en De tú a tú

 

Pamela Jiles


“Es verdad que ella me entrevistó cuando yo era muy chico. Creo que para ‘Informe Especial’. Y ella me dice ‘terminemos la entrevista en la ducha’. Estaba mi mamá. Yo me retracté de lo de la violación, que sonó fuerte, no lo debí haber dicho. Mal. Yo le dije ‘demándame, pero demándame luego porque en marzo voy a estar ocupado’. No le tengo mala a Pamela Jiles. No la conozco para nada, no tengo nada en contra de ella”.



Su personalidad conflictiva


Al preguntarle por su personalidad y si le ha causado problemas, Ríos se sincera y dice que “en ciertas cosas sí, porque mi manejo con la prensa me trajo problemas por no ser entendido o comprendido cuando era chico. Mucha gente lo tomó en mala. Ganarse cuatro veces el premio limón, la gente pensaba que yo era pesado. Y yo hu*a, me sentía orgulloso. Y que te pregunten por tu vida privada".

"En Chile, en una conferencia de Copa Davis, lo que menos se hablaba era de tenis. Entonces, me empecé a enojar y a esconderme un poco en mí, y cada vez que me molestaban, explotaba. Y vuelvo a lo mismo, nadie me enseñó, nadie me dijo ‘oye en vez de enojarte, agárralos pal huev**’. Yo no me encuentro pesado con la prensa ni nada. Me molestaron las preguntas en un momento y les agarré mala a ciertos periodistas y quizás puse a todos en un mismo saco. Iban a provocar y yo que soy chispita me caliento y respondía".

"Tuve muchos problemas en eso. Y con la prensa chilena para qué hablar. Imagínate estar comiendo en un restaurant con tu polola, y que entre un tipo con una cámara a tu mesa. ¿Qué pienso yo? Que al dueño del lugar le conviene porque por eso lo dejó pasar. ¿Qué hago yo? ‘oye puedes salir’ y no sale. Entonces, cosas así, que pasan la línea del respeto. Mucha gente me dice ‘te entiendo. A mí me llegan a hacer eso y el cornete que le pongo’. Y yo digo si yo también, pero me va a llegar demanda”.

Nunca fue a un psicólogo deportivo. “Yo decía lo que se me pasaba por la cabeza. Yo creo que en Chile como que me tiraron mucho y me aguantaron mucho. Lo que dijera no pasaba nada”. Y dice que una vez mandó a lavar el auto a un periodista. “¡Está mal! No estoy diciendo que esté bien, ni que es chistoso”.



Sus hijos


“Ellos (sus hijos) nunca me han visto llorar, lo que está muy mal. Ellos creen que yo soy casi invencible, por lo que he hecho, por lo que soy. No soy de llorar. A veces digo: capaz que se muere mi mamá y yo no llore. A veces siento miedo de esas cosas. No es que no tenga sentimientos”. Asegura que con sus hijos y con su familia no le cuesta expresar sus sentimientos. “Mi papá es una persona fría y a mí me criaron fríamente. Yo me acuesto con Marcelito, lo tengo acá, le doy besos, le hago cariño para que se quede dormido, y no tiene nada de malo. Yo no viví eso porque yo viajaba, mi papá era frío y no lo veía”.

Si le hizo falta, no lo sabe. Ahora su señora y sus hijos son muy cariñosos. “En la casa soy Marcelo Ríos y fuera soy el ‘Chino’ Ríos”. Concluye que “lo que me hace muy feliz es sentir que todo lo que tengo me la gané”.

Marcelo Chino Ríos en De tú a tú
Marcelo Chino Ríos en De tú a tú



Problema de salud , dejar de tomar y la angustia

Marcelo sufrió una vasoconstricción cerebral que lo mandó hospitalizado. Un día se despertó con dolor de cabeza y los ojos rojos. Lo internaron porque tenía cinco arterias bloqueadas. Le hicieron un examen de cocaína y sale limpio.

Se le desbloquearon las arterias, pero le preguntan cuánto alcohol consumía. No bebía todos los días, pero cuando tomaba, era una botella y media, por lo que le recomendaron tomar una copa de vino. “Para eso, no tomo nada. Y ahí dejé de tomar”.

Dice que nunca ha probado la cocaína. Sí ha probado éxtasis y marihuana. Dice que una vez fumó marihuana y trató de comerse una empanada. Estuvo una hora masticándola y no le pasaba.

También le aconsejaron dejar de trabajar tanto y ahí le dio angustia. Para controlarla, le recomendaron tomar ravotril pero sin dosis, por lo que él llegó a tomar 12 milígramos diarios. “Estoy acá, con un psiquiatra que me va a sacar el ravotril porque lo quiero dejar. Lo mío era angustia, lo que me pasó, vivir en Chile también me generaba angustia, salir, encontrarse con alguien”.

Una psicóloga le sugirió que se jubilara y su señora estuvo de acuerdo, y ahí se fueron a Estados Unidos.



Vida en Estados Unidos


Paula Pavic, su señora, habla de que al principio fue una prueba por un año de irse a vivir a Estados Unidos y que “al final se nos hizo nada y fue quedémonos más”.

Por su parte, él confiesa lo siguiente: “Me cambió totalmente la vida, acá es tranquilo y nadie me hue**. El hue*** de la gente y si me reconoce alguien es muy amable, te saluda, ¿Cómo estás? o te da la mano… pero ningún autógrafo ni una hue**”. Además, confiesa que “me levanto a las 5 todos los días y me encanta estar solo, tomar desayuno solo de 5 a 7”, y que entrena más de lo que lo hacía antes.



Relación actual con Constanza, su hija mayor


“(Constanza) se vino a vivir a Miami y ahora es partner de la Paula, si es su mejor amiga. Es la gracia. Hubo una noche en que la Cony parece que se curó y en vez de llamar a la mamá, llama a la Paula, y esa hue** me pone contento. La llama a las 4 de la mañana y la Paula atiende con sueño y ¿Qué te pasa? ¿En qué te puedo ayudar? Lo que pasa es que me siento como las hue***, ¿Qué tomo? Toma agua… y se empezaron a cagar de la risa y después se le pasó. Se llevan la raja”.


Matrimonio con Kenita Larraín


Martín pregunta cuántos matrimonios cuenta en su vida y él responde que dos. Sobre el de Kenita Larraín, responde que “lo que yo he dicho siempre es que fue una cuestión de calentura. Mi matrimonio con la Kena nunca existió, no fue un matrimonio… un matrimonio de tres meses no lo cuento como un matrimonio. Fue una etapa en que me sirvió para darme cuenta de que hay relaciones malas y de que hay gente mala también”.



Amor con Paula Pavic


Cuenta que la conoció en Las Urracas. Ella era amiga de una amiga de él. “Estuve dos horas (conversando con la Paula) y la amiga me preguntó si las podía llevar y las llevé. La amiga se sentó adelante y me preguntó si quería entrar. Entonces ahí la Paula pensó que yo quería algo con la amiga y no era así. Y ahí la empecé a conocer hasta que en Viña una vez jugamos a ‘verdad y consecuencia’, y le dije: ‘ya, dame un beso’, me dio un beso y no nos separamos nunca más”.

Paula destaca que “somos dos personas diferentes que lo hemos sabido manejar súper bien porque yo siempre me mantengo tras bambalinas y no hay problema con eso”.

Pavic añade que él “dentro de la casa es una persona totalmente diferente” y pone énfasis que “ya al llegar a Chile se empieza a poner corazas en el aeropuerto, entonces es como yo siento ese peso de tener que andar con el Chino Ríos para todos lados. A mí el Chino Ríos no me gusta tanto como Marcelo Ríos. Por eso acá ha sido tan fácil, porque es la misma persona en todos lados. De hecho, acá es mucho más sociable que en cualquier parte, acá habla con todo el mundo, es simpático con todo el mundo… pero es cosa que le digan soy de Chile o escuche un acento chileno y algo le pasa”.

“Ustedes me cagaron el día”, agrega Marcelo en esa parte.

Él dice que “desde el primer día le dije a la Paula, ‘mira si vamos a estar juntos, acostúmbrate a esta h***’”.

Ya llevan 13 años casados y 15 juntos. Si ha sido un buen matrimonio, Marcelo responde: “Los comparo con los otros y sipo. Lo que pasa es que con la Giuliana no fue malo, pero éramos muy chicos, muy pendejos los dos y no sirvió. El otro no cuenta. Y este sí, bien, bien pero obviamente uno tiene sus altos y bajos, pero habernos venido a vivir acá nos ha servido harto porque estoy yo y ella, no tenemos a nadie más”.

Marcelo Chino Ríos en De tú a tú
Marcelo Chino Ríos en De tú a tú



La paternidad


Si pone reglas a sus hijos, responde “Yo creo que los dejo ser, no soy mucho de poner reglas y no soy mucho de castigos”.

Acerca de la homosexualidad y de si un hijo de él le dijera que lo es y cómo se lo tomaría él, aclara que: “Yo no lo tomo como una enfermedad, pero me costaría aceptarlo, obviamente que me costaría, no es una cosa fácil para mí. Pero tendría que apoyarlo, no me quedaría otra, ¿qué voy hacer? Me costaría, no lo miento, no estoy preparado, pero creo que sería lo suficientemente maduro y tratar de entenderlo y de que existe. Existe y le puede tocar a cualquiera y está bien, pero ¿qué me guste y me agrade? No me agrada”.

Él define que sus hijos y su señora son lo más importante.  

 

Sin un rumbo laboral tras el tenis


“No he encontrado nada que me llene, que te levantes con ganas de hacerlo…que no sea competitivo, que no ande luchando por ser mejor que el otro, que sea algo en donde vaya tranquilo, en paz y a disfrutarlo. No lo encuentro”, declara sobre su presente laboral.

Marcelo Chino Ríos en De tú a tú
Marcelo Chino Ríos en De tú a tú



Duelo de ping pong


Hacia el final del programa, Marcelo Ríos y Martín Cárcamo jugaron un partido de ping-pong. “Yo soy buen perdedor, muy buen perdedor”, dijo el ex tenista antes de empezar el partido. A medida que fueron jugando, Martín le preguntó varias preguntas:

¿Cuál es el mejor tenista de todos los tiempos?

“Ríos”.

¿Alguna vez jugaste algún partido con caña?

“Ahora”.

¿Cuál fue el momento más tenso de su carrera?

“Ahora”.

Si tuvieras que entrenar a alguien, ¿a quién entrenarías?

“Cárcamo”. 

Marcelo Chino Ríos en De tú a tú
Marcelo Chino Ríos en De tú a tú

Tras un intenso partido, Martín Cárcamo le ganó 23-21, mientras Marcelo Ríos tiró con fuerza la paleta al piso. ¿Cuándo tú ganabas y el otro se iba, qué le decías a los tenistas? “Hay que dar la mano y le decí conch…”



Ricardo Arjona


Al final, Martín Cárcamo habla del fanatismo de Chino Ríos por Ricardo Arjona: "Lo que pasa es que hay canciones que me llegan, me gusta como canta y yo lo conocí en Costa Rica. Yo estuve en el casino de Costa Rica con él, con su whisky, su puro, sus botas negras, y estuvimos conversando. El gallo es espectacular, las canciones a mí me encantan, es un capo cantando, yo quise y he querido que me escriba una canción para que la toque cuando yo me muera. Yo creo que no me va a decir que no”



"One in a million"


La última pregunta: ¿Cuál es tu próximo proyecto Chino?: “Próximo proyecto, documental de mi vida que no lo he podido hacer nunca. Por primera vez lo voy hacer en Amazon Prime. Son 4-5 capítulos, pero más que hablar de tenis o lo que se ha hablado siempre, es contar lo que ha sido mi vida: cómo la he llevado, qué es lo que ha pasado, quién soy yo fuera del tenis. Es una cosa potente, fuerte, que se va a llamar ‘One in a million’”.

 

 

PROGRAMA COMPLETO: Marcelo Chino Ríos en De tú a tú