Cómo hacer que su hijo deje de mentir todo el tiempo (y por qué mienten en primer lugar)

La primera vez que un padre descubre a su hijo en una mentira, es suficiente para hacer que el corazón de madres y padres y apoderados duela. No importa si se trata de un plato roto en el suelo o de los dulces que se perdieron del cajón; la mayoría de las madres y los padres quieren criar a sus hijos con integridad y en un entorno de verdad. Y cuando los niños son deshonestos, es fácil sentir que se ha roto un valor esencial en la relación.

Pero aquí está la buena noticia: mentir es parte del desarrollo normal de un niño y, de hecho, es común entre los niños pequeños.

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¿Por qué los niños mienten?

Los niños pequeños desconocen las implicaciones morales de mentir. Esto se debe a que a menudo les resulta difícil distinguir entre lo real y lo imaginario cuando son jóvenes, y quieren solo quieren complacer a los mayores.

Tal como señala el sitio web de la Academia norteamericana de psiquiatría infantojuvenil (AACAP): "A los niños pequeños (de 4 a 5 años) les gusta hacer cuentos e inventar historias. Esta es una actividad normal ya que ellos se divierten oyendo e inventando cuentos. Estos niños muchas veces confunden un poco la realidad con la fantasía".

Por su parte la Dra. Becky Kennedy, psicóloga clínica y madre de tres hijos indica: “La línea entre la fantasía y la realidad es un poco más oscura para [los niños] de lo que podría ser para [los adultos]”,.

Y agrega que los niños dirán una mentira cada vez que crean que decir la verdad los meterá en problemas. Ven la mentira como una forma de permanecer cerca de sus padres, asegurando su supervivencia biológica y seguridad psicológica, que son necesarias para que un niño crezca y prospere.

“Desde un punto de vista evolutivo, nuestros hijos necesitan sentirse seguros con nosotros, lo que significa que necesitan sentir que los queremos cerca y que los amamos”, dice. "Si decir la verdad los hará sentir avergonzados y solos, se sentirán obligados a mentir para seguir sintiéndose bien en este momento".

¿Qué debe hacer cuando su hijo miente?

Como se mencionó anteriormente, es difícil para los niños pequeños discernir entre el bien y el mal, y castigarlos por actuar mal y acostumbrarlos a reaccionar por miedo podría llevar a que se tomen aún más en serio el camino de la mentira. 

Por ejemplo, cuando un niño derriba la torre de bloques de otro niño e insiste en que no lo hizo, Kennedy recomienda que, en lugar de intentar atraparlo en una mentira o acusarlo de ser deshonesto, intente escucharlo para reconstruir la confianza:

“Diles: 'Oh, no lo derribaste. Si alguien lo hizo, y sé que no eres tú, supongo que sucedió algo que hizo que ese niño empujara la torre de su hermano hacia abajo. Me pregunto qué habrá estado sintiendo ese niño. Si averigua quién es ese niño, ¿podría decirles que no me enfadaré? No habrá castigo. Solo quiero saber qué está pasando para que podamos evitar que eso vuelva a suceder '”.

Es probable que haya emociones difíciles detrás del comportamiento no deseado de un niño. Si un niño cree que sus padres están interesados ??en lo que sienten por dentro, es más probable que digan la verdad. 

Kennedy usa el ejemplo de cuando un hermano mayor golpea a su hermano menor y miente al respecto. Al enviarlos a su habitación en lugar de comprender por qué sucedió el incidente, creerán que los padres solo se preocupan por lo que sucede externamente y no los verán como un buen niño. Los padres no deben tolerar las mentiras o los golpes, sino que deben intentar averiguar por qué ocurrieron.

En algunos casos, el niño podría estar mintiendo sobre lo que sucedió entre él y su hermano para llamar la atención. En casos como este, están jugando a ser víctimas para obtener lo que necesitan.

“Será menos probable que ese niño mienta, ya que han aprendido que sus padres lo ven como un buen niño y están dispuestos a escuchar acerca de los sentimientos más complejos relacionados con el comportamiento”, dice Kennedy.

Luego está ese momento que todos los padres experimentan: un padre le dice a un niño que no puede hacer algo, luego el niño le dice al otro padre que sí puede, como cuando un niño le dice a papá que mamá dijo que podían jugar en el iPad cuando mamá en realidad les dije que no. Kennedy dice que no se trata de manipular a los padres, sino de que el niño lucha por regular su decepción por menos tiempo frente a la pantalla.

“La mentira sucede para evitar la angustia de querer y no tener”, explica. "En lugar de enojarse porque están tratando de engañarlo, hable con ellos de que comprende que les debe resultar difícil escuchar un no, y que deben haber estado muy decepcionados".

¿Qué sucede cuando la mentira va demasiado lejos?

Si este enfoque para tratar de comprender por qué un niño miente en realidad no frena su deshonestidad, es hora de informar a los niños que sus acciones tendrán repercusiones. Según el Dr. Matthew Rouse, psicólogo clínico del Child Mind Institute, el castigo no tiene por qué ser excesivo, pero debe abordar la mentira, así como sobre lo que estaban mintiendo. Por ejemplo, si un adolescente afirma que ha estado haciendo sus deberes y no lo ha hecho, debería ser castigado por su deshonestidad y obligado a completar su trabajo.

Pero Rouse también señala que los niños deben saber que decir la verdad reduce el castigo, como cuando un adolescente miente sobre ir a una fiesta pero luego llama a un tutor para que lo lleve a casa porque está intoxicado. Es una línea muy fina caminar cuando un niño ha mentido sobre dónde estaba, pero luego hizo lo correcto al no conducir ebrio. Los padres pueden hacer saber a los niños que habrá una reducción en su castigo debido a su máxima honestidad.

A veces, el inicio de la mentira es repentino e intenso, dice Rouse. "Es algo nuevo en el que eran bastante sinceros la mayor parte del tiempo antes y luego, de repente, están mintiendo sobre muchas cosas", dice. Esto, por supuesto, preocupa a los padres. Pero si los cuidadores pueden entender por qué los niños mienten y estar preparados para lidiar con el problema, la verdad puede salir a la luz.

Cómo hacer que la honestidad sea un valor

La Dra. Carol Brady le dijo al Child Mind Institute que los padres deben hacerle saber a sus hijos que la perfección no es una expectativa. Brady sugiere una "verificación de la verdad", en la que después de que un niño ha mentido, un padre les da unos minutos para reconsiderar su respuesta.

Los padres también podrían decir algo como: “Te voy a hacer una pregunta y tal vez me digas algo que realmente no quiero escuchar. Pero recuerda, tu comportamiento no es lo que eres realmente. Te amo pase lo que pase, y a veces la gente comete errores. Así que quiero que pienses en darme una respuesta honesta ".

Brady no recomienda este método para un mentiroso crónico, pero podría ser de gran ayuda para establecer la importancia de decir la verdad y tener integridad.