Salud
Se confirmó en qué lugares de Chile será obligatorio el uso de mascarilla a partir de este 15 de abril
Una medida que revive viejas costumbres frente a nuevos desafíos respiratorios en Chile.El próximo 15 de abril, los centros de salud en Chile volverán a exigir el uso de mascarilla tanto al personal médico como a los pacientes que asistan a los servicios de urgencia. Esta disposición, publicada en el Diario Oficial, responde a una nueva Alerta Sanitaria decretada por el Ministerio de Salud ante el aumento de enfermedades respiratorias.
Aunque para muchos el uso de mascarillas quedó atrás con el fin de la pandemia de COVID-19, la realidad muestra un panorama distinto: los virus respiratorios siguen activos y variados. Según el Instituto de Salud Pública (ISP), entre los patógenos detectados en las últimas semanas figuran el rinovirus, la influenza A y B, el parainfluenza, el VRS y el SARS-CoV-2, entre otros.
¿Dónde se aplicará esta medida nuevamente?

La medida se aplicará exclusivamente en los servicios de urgencia de todos los niveles, públicos y privados, donde el riesgo de contagio es mayor debido a la alta circulación de pacientes con síntomas. El Ministerio ha especificado que deberán usarse mascarillas quirúrgicas, médicas o respiradores de alta eficiencia como N95 o KN95.
Especialistas del ISP han señalado que el análisis de muestras hospitalarias y ambulatorias revela una intensa circulación viral en el país. Por eso, el uso obligatorio de mascarilla busca prevenir contagios masivos y proteger especialmente a los grupos más vulnerables, como adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.

Sin embargo, la decisión no está exenta de controversia. Mientras sectores del ámbito médico aplauden la medida como una forma efectiva de anticiparse a un colapso sanitario, otros critican la falta de claridad en la comunicación hacia la población y cuestionan la extensión de la obligación hasta el 31 de agosto, en principio.
En un escenario donde la memoria de la pandemia aún está presente, las mascarillas vuelven a ocupar un rol central, al menos en los centros de urgencia. La medida, más allá de su obligatoriedad, reactiva también la reflexión sobre cómo cuidarnos colectivamente en tiempos de virus persistentes.