Bono de casi 1 millón de pesos: quiénes pueden recibir este subsidio en Chile

El Instituto de Previsión Social (IPS) ha implementado la Asignación por Muerte, un beneficio económico de $966.885 destinado a quienes hayan perdido a un familiar que era beneficiario de la entidad. Este aporte está diseñado para aliviar el impacto financiero de los costos funerarios, brindando un soporte a las familias en momentos tan difíciles.

Para acceder a este beneficio, es fundamental que el solicitante asuma los gastos funerarios del fallecido. La persona que haya muerto debe haber sido beneficiaria del IPS y no registrar afiliación a un sistema de pensiones regulado por el Decreto Ley (DL) Nº 3.500 al momento de su deceso. Adicionalmente, el fallecido debe cumplir con al menos una de las siguientes condiciones: haber sido beneficiario de la Pensión Básica Solidaria de Vejez (PBSV) o del Aporte Previsional Solidario de Vejez (APSV), haberse pensionado por la Pensión Básica Solidaria de Invalidez (PBSI), o haber tenido alguna cotización en las ex cajas de previsión dentro de los seis meses previos a su fallecimiento.

Las solicitudes para obtener la Asignación por Muerte pueden realizarse en cualquier momento del año. Para facilitar el proceso, los interesados deben ingresar al sitio web del IPS, donde deberán introducir el RUT del solicitante y del fallecido para validar la información. Una vez verificados los datos, el solicitante deberá ingresar con su Clave Única y completar los formularios requeridos.

Es importante que el solicitante adjunte la documentación necesaria, incluyendo la factura original del servicio funerario y, si ha pasado más de 30 días desde el deceso, el certificado de sepultación correspondiente. Estos documentos asegurarán que el proceso de asignación se realice de manera efectiva y sin demoras.

El IPS reafirma su compromiso de apoyar a las familias que atraviesan la pérdida de un ser querido, ofreciendo esta ayuda oportuna en un momento crítico. El acceso a esta asistencia económica es un paso significativo para brindar un poco de tranquilidad en medio del dolor y los gastos imprevistos que conlleva un fallecimiento.