Bolsonaro amenaza a periodista: "Que ganas de reventarte la boca a golpes"

Al acercarse a la Catedral de Brasilia, un reportero del diario "O Globo" preguntó por los cheques por un total de R $ 89 mil (que equivalen a un poco más de 12 millones y medio) que habrían sido depositados entre 2011 y 2016 por el exasesor Fabrício Queiroz y su esposa, Márcia Aguiar, en la cuenta de la primera dama, Michelle Bolsonaro.

Primero, Bolsonaro dijo que no respondería. Posteriormente, el presidente dijo a los periodistas: "Voy a llenar la boca de este tipo con una paliza". En la secuencia, el presidente enmendó: "Mi deseo es llenarte la boca a golpes".

Sobre el episodio, el diario "O Globo" publicó la siguiente nota: "O Globo repudia la agresión del presidente Jair Bolsonaro contra un reportero de un diario que solo desempeñó su rol, de manera totalmente profesional, este domingo. Tal intimidación demuestra que Jair Bolsonaro desconoce el deber de cualquier servidor público, sin importar su cargo, de rendir cuentas a la población, por encima de los gobiernos de todos los presidentes. O Globo no rehuyó hacer las preguntas necesarias para cumplir con el mayor rol de la prensa, que es informar. y continuará haciendo las preguntas que deben hacerse, en este y en todos los gobiernos".

El presidente de la Asociación Nacional de Periódicos, Marcelo Rech, dijo que es lamentable que una vez más el mandatario reaccione de forma agresiva e intempestiva a una pregunta de un periodista y que esta actitud, de ninguna manera contribuye al esperado ambiente democrático y de libertad de prensa mandatado por la Constitución.

El presidente del Colegio de Abogados de Brasil, Felipe Santa Cruz, dijo que al presidente le había ido muy bien en las últimas semanas, con moderación, contribuyendo a la pacificación del debate público, y que es lamentable ver el regreso del perfil autoritario que tanta aprensión provoca en los demócratas.

La Asociación de Prensa Brasileña dijo que una vez más el presidente Jair Bolsonaro conmociona al país con su comportamiento grosero. Ese comportamiento demuestra no solo una inaceptable falta de educación, sino también un intento de intimidar a la prensa, buscando evitar preguntas incómodas.

La Asociación Brasileña de Periodismo de Investigación afirmó que la reacción de Bolsonaro no solo fue incompatible con su cargo en el máximo cargo de la república, sino también con las reglas de convivencia en una sociedad democrática.