Alarmante descubrimiento
Pacientes asintomáticos también sufren daño pulmonar
Según un estudio realizado en China, contraer el SARS-CoV-2 ya es suficiente para desarrollar daño pulmonar. Los consejos actuales alientan a los pacientes a quedarse en casa si son asintomáticos, lo que hace que la presentación tardía al hospital y la muerte súbita sean un riesgo distinto.La medicina moderna enfatiza correctamente la importancia de la ciencia. Sin embargo, el enfoque con demasiada frecuencia desplaza la atención del punto real de la atención médica: la atención (valga la redundancia). Hasta el momento; donde poco se sabe debido al poco tiempo y a que los estudios son atomizados y repartidos por el mundo y no hay una panorámica completa sobre el SARS-CoV-2, los médicos siguen descubriendo en terreno nuevas luces sobre el Covid-19 a los que hay que prestarles atención.
Daño pulmonar silencioso
Muchos pacientes con enfermedad Covid-19 avanzada no tenían ninguno de los rasgos distintivos de la enfermedad respiratoria grave hasta que colapsaron y murieron repentinamente.
Ahora está surgiendo evidencia, a través de la ciencia, sobre qué es lo que hay detrás de esta primera lección, con un estudio de Wuhan, en China, que describe los cambios patológicos pulmonares en las tomografías computarizadas de pacientes completamente asintomáticos.
Cabe mencionar que el transporte asintomático no es infrecuente en otras infecciones virulentas, como el Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (MRSA) y la Colitis seudomembranosa (C diff) , pero lo que llama la atención con el SARS-CoV-2 (el virus que causa Covid-19) es que puede estar acompañado de daño orgánico subyacente.
Los investigadores encontraron lesiones consistentes con inflamación del tejido pulmonar subyacente (opacidades de vidrio esmerilado y consolidación, para usar la jerga médica), que no son específicas de la infección por SARS-CoV-2 y pueden verse en muchas otras formas de enfermedad pulmonar. Lo que sigue siendo un misterio es por qué, a pesar de estos cambios, los pacientes no muestran síntomas típicos de neumonía, como falta de aliento severa.
El ensayo señala además lo siguiente:
Las lesiones de la tomografía computarizada en pacientes asintomáticos con neumonía por COVID-19 se localizaron predominantemente en el área periférica y subpleural del pulmón (44, 75.9%), involucrando principalmente uno o dos lóbulos pulmonares (38, 65.5%).
Cerca de una cuarta parte de los pacientes en el estudio desarrollaron fiebre, tos y dificultad para respirar, pero muchos no. La respuesta idiosincrásica a la infección es uno de varios acertijos de Covid-19, como el por qué se dirige a ciertos grupos y no a otros: dos personas con exactamente la misma demografía y salud pueden expresar la enfermedad en los extremos opuestos del espectro. El estudio refuerza que la ausencia de síntomas no implica la ausencia de daño.
Los riesgos de los pacientes asintomáticos
Según advierte John Kinnear, Jefe de la Facultad de Medicina, Universidad Anglia Ruskin el riesgo es alarmante:
" La falta de síntomas frente a la patología activa conlleva un riesgo tanto para las personas infectadas como para el público. Los consejos actuales alientan a los pacientes a quedarse en casa si son asintomáticos, lo que hace que la presentación tardía al hospital y la muerte súbita sean un riesgo distinto."
Y luego advierte:
"Y luego está la pesadilla de salud pública. Hasta el 40-45% de las personas infectadas con SARS-CoV-2 permanecen asintomáticas, con una carga viral tan alta como las que están activamente enfermas. Agrega a eso la tasa significativa de falsos negativos de hasta el 20% para las pruebas de detección, donde a las personas se les dice erróneamente que no tienen la infección, y la escala del problema se magnifica. Estos son los transmisores encubiertos que continúan eliminando el virus por hasta 14 días."
Con el correr del tiempo, se van juntando fragmentos de evidencia lentamente, principalmente de muchos estudios pequeños y dispares. Recién los científicos se podrán hacer la imagen completa a medida que la calidad y cantidad de evidencia se expanda y refine nuestra comprensión del SARS-CoV-2.
Sin embargo, hay que tomar en cuenta que la ciencia aún no informa a los médicos sobre la mejor manera de manejar al paciente antes que ellos lo descubran experiencialmente.
Las lesiones en una tomografía computarizada no pueden determinar qué tratamiento se necesita. Todavía resulta fundamental una decisión personalizada basada en el juicio clínico.