Invierno
Cuál es la mejor temperatura para usar el aire acondicionado en invierno y no gastar de más
El aire acondicionado no solo sirve para el verano. En invierno, usarlo bien puede mejorar el confort del hogar y ahorrar energía.El aire acondicionado es comúnmente vinculado al verano, pero durante el invierno también juega un papel clave para mantener el hogar cálido y confortable. Usar el aire acondicionado en esta época requiere ajustar la temperatura con cuidado para evitar un consumo excesivo y garantizar un ambiente agradable.
Cuál es la mejor temperatura para usar el aire acondicionado
Los sistemas modernos de aire acondicionado, especialmente los que cuentan con tecnología inverter y bomba de calor, permiten calentar el hogar de manera rápida y con menor gasto energético. Instalarlo en invierno no solo facilita su uso inmediato para calefacción, sino que también permite probar el funcionamiento en condiciones frías y detectar fallas a tiempo, evitando problemas durante el verano, cuando la demanda es mayor.
Otro beneficio importante de usar el aire acondicionado en invierno es que los usuarios tienen tiempo para familiarizarse con el equipo sin la presión del calor extremo. Aprender a configurar la temperatura, modos de ventilación y otras funciones mejora el aprovechamiento del aparato y reduce el consumo innecesario.
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Para un uso eficiente del aire acondicionado en invierno, especialistas recomiendan mantener la temperatura entre 20°C y 22°C durante el día. Ajustar el termostato a esta franja asegura confort térmico sin un aumento considerable en la factura de energía. Por la noche, bajar la temperatura a 18°C favorece el descanso y ayuda a reducir aún más el consumo eléctrico.
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Acciones para un uso óptimo del aire acondicionado en invierno:
- Instalar y probar el aire acondicionado durante el invierno para detectar fallas a tiempo.
- Mantener la temperatura entre 20°C y 22°C durante el día.
- Reducir a 18°C la temperatura durante la noche para descansar mejor.
- Realizar limpieza y mantenimiento de filtros y serpentinas periódicamente.
- Verificar sellos y aislamientos para evitar pérdidas de calor.
- Preferir equipos con tecnología inverter para un consumo más eficiente.