Psicología

Cuál es el perfil psicológico de las personas que aman el invierno, según la psicología

Según la psicología, elegir el invierno no es casual: hay rasgos de personalidad y emociones profundas detrás de esa elección.
sábado, 5 de julio de 2025 · 11:00

Mientras muchas personas asocian el verano con la felicidad, otras encuentran en el invierno un refugio emocional. Desde la psicología, esta preferencia no es solo una cuestión climática, sino también un reflejo de características internas. Quienes se sienten cómodos en ambientes fríos, con menos estímulos externos, suelen tener una mayor vida interior y disfrutan del recogimiento. 

Cuál es el perfil psicológico de las personas que aman el invierno

Un rasgo común en quienes prefieren el invierno es la tendencia a la reflexión. Estas personas valoran los espacios silenciosos, los entornos íntimos y los momentos de soledad elegida. Suelen sentirse a gusto en actividades como la lectura, la escritura o la contemplación. 

Quienes eligen el invierno como su estación favorita suelen mostrarse más organizados, metódicos y reservados. Les resulta más fácil encontrar confort en la repetición diaria que en los estímulos intensos. Esa preferencia puede estar asociada a una forma de regular la energía personal, evitando el caos externo. 

Invierno. Fuente: iStock.

La psicología también señala que quienes aman el invierno suelen mostrar mayor tolerancia a la incomodidad física. No les molestan las bajas temperaturas, ni la necesidad de abrigarse o modificar su rutina para adaptarse. Esto puede estar relacionado con una alta capacidad de adaptación o incluso con una percepción del cuerpo que prioriza el bienestar interno por sobre las condiciones externas. 

Invierno. Fuente: iStock.

Por último, el amor por el invierno puede reflejar una personalidad que no teme al recogimiento emocional. Mientras otros buscan huir de los días oscuros, quienes prefieren esta estación se sienten cómodos en esa pausa. Lejos de la hiperactividad del verano, el invierno les ofrece un contexto para observar, procesar y reencontrarse.