Astrología

Astrología: los 3 signos que nacieron con mala suerte y no lo saben

A veces la energía del universo no juega a favor, y algunos signos parecen vivir en una nube de imprevistos.
viernes, 13 de junio de 2025 · 07:30

Aunque muchos creen que el destino se construye con actitud y trabajo, en astrología hay signos que parecen estar un paso atrás cuando se trata de suerte. No se trata de pesimismo ni de supersticiones sin fundamento, sino de una tendencia a repetir patrones que los alejan de los resultados deseados. Estos signos, sin saberlo, cargan con una predisposición cósmica que los vuelve más vulnerables a la frustración.

Piscis, por ejemplo, es uno signos más soñadores del zodíaco, pero su exceso de confianza en los demás y su tendencia a escapar de la realidad lo hace tropezar con las mismas piedras una y otra vez. Confían rápido, se entregan del todo y luego se preguntan por qué las cosas no salieron como esperaban. La falta de límites los arrastra a situaciones desventajosas.

Cuando el cosmos no coopera

Su optimismo no basta cuando las decisiones impulsivas los dejan a merced del azar. Fuente: Canva

Sagitario también forma parte del grupo menos afortunado. Aunque aparentan optimismo, muchas veces toman decisiones impulsivas sin pensar en las consecuencias. Su filosofía de “todo se resuelve” suele dejarlos mal parados cuando la vida les exige estructura. La buena suerte no alcanza si no hay una estrategia detrás de sus movimientos.

Aries, el signo del fuego puro, lucha constantemente con la frustración. Tienen una voluntad férrea pero pocas veces se detienen a reflexionar. La repetición de errores, la impaciencia y la falta de pausa los mantiene estancados. Lo que perciben como “mala suerte” es, muchas veces, el resultado de actuar sin pensar.

La mala suerte muchas veces es solo el reflejo de actuar sin detenerse a pensar. Fuente: Canva

Hay quienes nacen con una estrella, y otros con una tormenta de nubes. Pero incluso para estos signos, hay luz al final del túnel. La clave está en el autoconocimiento, en aprender a leer las señales del universo y ajustar el rumbo antes de que el mismo obstáculo vuelva a aparecer.

Aceptar que algo no anda bien no es una derrota, sino el primer paso hacia el cambio. Si estos signos logran salir del piloto automático, pueden transformar su aparente mala suerte en un nuevo comienzo. Después de todo, hasta las peores rachas terminan.