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El fertilizante casero a base de 2 ingredientes de cocina que fortalece tu Lengua de Suegra en menos de 1 semana
La sansevieria puede crecer más fuerte y sana si recibe un abono casero con un ingrediente que tenés en tu cocina. Descubrí cómo usarlo correctamente y mejorar el estado de tu planta de interior.
En tiempos de bajas temperaturas, muchas plantas de interior sufren por el frío o por la sequedad que provoca la calefacción. La lengua de suegra, sin embargo, es una de las especies que puede adaptarse mejor, siempre que reciba los nutrientes adecuados. Un abono casero hecho con gelatina es una forma simple de mejorar su resistencia y favorecer su crecimiento.
El fertilizante casero a base de 2 ingredientes de cocina
Los expertos en jardinería recomiendan combinar este abono con una rutina de cuidados básicos. La clave está en disolver correctamente la gelatina y aplicarla sobre el sustrato sin encharcarlo. La lengua de suegra no tolera el exceso de humedad, por eso es importante que el fertilizante casero sea líquido, pero en una dosis justa. La gelatina, al estar compuesta por colágeno y proteínas, actúa sobre las raíces sin alterar el equilibrio de la planta.
La preparación requiere solo tres cucharadas de gelatina sin sabor, agua caliente y fría. Se mezclan hasta obtener un líquido uniforme que luego se aplica directamente en la base. Este proceso se puede repetir cada 20 días. La lengua de suegra absorbe los nutrientes sin complicaciones y, en poco tiempo, se notan mejoras en el color y la firmeza de las hojas. En el caso de ejemplares jóvenes, también acelera el crecimiento y fortalece los brotes nuevos.
Además del colágeno, la gelatina contiene una dosis de nitrógeno que favorece la producción de clorofila. Esto es especialmente útil para la lengua de suegra, que necesita buena iluminación pero no luz directa. Al recibir estos nutrientes de forma casera, la planta refuerza su estructura interna y evita que las hojas se pongan flácidas o pierdan su color. Este truco es ideal para quienes buscan soluciones económicas y efectivas para sus plantas de interior.
Otra ventaja de este abono es que mejora la textura del suelo. Si bien la lengua de suegra prefiere sustratos aireados y con buen drenaje, un toque de gelatina ayuda a que la humedad se mantenga sin saturar. Así, la planta recibe agua y nutrientes de manera equilibrada. No hace falta cambiar la tierra con frecuencia ni usar fertilizantes industriales que pueden resultar agresivos. Con este método, se estimula el crecimiento sin alterar el ambiente natural del hogar.
