Astrología
Astrología: estos son los 3 signos que nacieron para tener relaciones tóxicas y no lo saben
La intensidad emocional puede ser un arma de doble filo para algunos signos del zodiaco.En el universo del zodiaco, hay signos que viven el amor como una montaña rusa: con intensidad, entrega total y una cierta tendencia a ignorar las señales de alerta. Aunque todas las personas pueden caer en vínculos poco sanos, hay quienes parecen tener una atracción casi inevitable por relaciones conflictivas. ¿La culpa es de los astros? Quizás.
Entre los doce signos, tres destacan por su predisposición a involucrarse emocionalmente en exceso, incluso cuando eso significa salir lastimados. Estos signos no necesariamente buscan el drama, pero muchas veces lo toleran o hasta lo justifican en nombre del amor. Su necesidad de conexión emocional profunda los puede llevar a relaciones donde el equilibrio brilla por su ausencia.

Los signos más propensos a relaciones tóxicas
Cáncer es el primero en la lista. Su sensibilidad y entrega hacen que se vincule desde un lugar muy emocional, esperando que el otro devuelva el mismo nivel de compromiso. El problema aparece cuando idealiza al otro y se queda esperando un cambio que nunca llega. Cree que el amor todo lo puede, y muchas veces, eso le juega en contra.
Escorpio, con su intensidad característica, ama con pasión… y desconfianza. Necesita control, y cuando lo pierde, puede caer en juegos emocionales destructivos. Los celos, el misterio y su costado manipulador no ayudan. Aunque le cuesta soltar, rara vez sale ileso de los vínculos que construye desde la posesión más que desde la confianza.
Por su parte, Piscis suele enamorarse de una versión imaginaria del otro. Empático y soñador, muchas veces prioriza el bienestar ajeno por encima del propio. Se entrega completamente, incluso cuando hay señales de que no es correspondido del mismo modo. Su tendencia a la evasión hace que tarde en ver el problema, y cuando lo hace, ya está demasiado involucrado.

¿Destino o aprendizaje emocional?
La buena noticia es que nadie está condenado por su signo. Si bien estas tendencias están presentes, el crecimiento personal, la terapia y la toma de conciencia pueden cambiar el rumbo de cualquier historia amorosa. Los vínculos saludables también pueden construirse, incluso en quienes más han sufrido.
La astrología no determina, pero sí ilumina patrones. Reconocerlos es el primer paso para transformar el amor en algo que nutre y no que consume. Porque a veces, amar bien empieza por aprender a amar(se) mejor.