Las clásicas galletas de la abuela pero sin harina: aprende esta saludable receta con sólo 5 ingredientes de tu cocina

La cocina saludable está en auge, y hoy te presentamos una receta sencilla y deliciosa para hacer galletas sin harina. Esta alternativa es ideal para quienes buscan mantener un estilo de vida sano, pero no quieren renunciar al placer de un buen postre. Estos bocaditos no solo son accesibles, sino también muy fáciles de preparar.

Ingredientes necesarios

Para disfrutar de estas galletas, solo necesitarás cinco ingredientes, fáciles de conseguir y que probablemente ya tengas en la despensa:

• 180 g de mantequilla de maní
• 120 g de harina de almendras
• 1 cucharadita de polvo de hornear
• 50 g de chocolate negro troceado
• 100 g de miel o sirope de arce (como endulzante)

Método de preparación

Una vez que tengas todos los ingredientes listos, es hora de comenzar a preparar tus galletas. Comienza por precalentar el horno a 180 grados Celsius. Esto permitirá que las galletas se cocinen de manera uniforme y queden perfectamente doradas.

En un bol grande, mezcla la mantequilla de maní con la miel. Asegúrate de que estén bien integradas, ya que esto será la base de tus galletas. Luego, añade la harina de almendras y el polvo de hornear, y mezcla hasta obtener una masa homogénea.

Agregar el chocolate

Una vez que tu masa esté lista, agrega los trozos de chocolate negro. Este pequeño detalle hará que tus galletas sean aún más irresistibles, ya que el chocolate se derretirá ligeramente durante la cocción, creando un contraste delicioso con la masa. Mezcla bien para que el chocolate quede distribuido de manera uniforme.

Ahora, es tiempo de dar forma a tus galletas. Toma porciones de masa y forma bolitas del tamaño de una nuez. Si prefieres galletas más grandes, simplemente ajusta el tamaño. Luego, aplástalas ligeramente antes de colocarlas en una bandeja forrada con papel para hornear.

Cocción para estas galletas sin harinas

Introduce la bandeja en el horno precalentado y cocina por unos 10 a 12 minutos, o hasta que los bordes estén dorados. Es fundamental no sobrecocinar las galletas, ya que se seguirán cocinando un poco más una vez fuera del horno. Deja enfriar un par de minutos antes de transferirlas a una rejilla para que se enfríen completamente.

Estas galletas sin harina son una excelente opción para acompañar un café o simplemente para disfrutar como un snack en cualquier momento del día. Además, al estar hechas con ingredientes saludables, son perfectas para compartir con amigos y familiares sin culpas. ¡Buen provecho!