Plantas de interior
Estas son las 5 plantas que debes tener en tu baño porque eliminan los malos olores de forma natural
Una selección de especies que combinan decoración y frescura para mejorar el ambiente de tu baño.
El baño es uno de los lugares más delicados del hogar cuando hablamos de limpieza. Aun con una rutina constante de desinfección, la humedad y la falta de ventilación suelen dejar una huella poco agradable: el mal olor. Frente a eso, hay una solución estética, económica y sorprendentemente eficaz que cada vez gana más adeptos: las plantas.
Lejos de ser solo un elemento decorativo, algunas especies tienen la capacidad de purificar el aire, absorber humedad y neutralizar olores. Se adaptan bien a espacios pequeños, con poca luz y con altos niveles de humedad, lo que las convierte en candidatas ideales para vivir —y florecer— en el baño.
Una de las más recomendadas es el helecho, una planta resistente, fácil de mantener y perfecta para rincones sin luz directa. Además de aportar un toque verde y fresco, ayuda a eliminar toxinas del ambiente. Si buscás un efecto visual más aromático, la menta puede ser tu aliada: es estética, aromática y actúa como desodorante natural.
Estas son las plantas que son ideales para que tengas en tu baño
Otra especie que cumple múltiples funciones es el aloe vera, que además de purificar el aire, absorbe el exceso de humedad y puede usarse como remedio natural para pequeñas heridas o quemaduras. En la misma línea de funcionalidad, el lirio de la paz destaca por su capacidad de neutralizar olores, florecer en interiores y aportar elegancia.
Para quienes buscan convertir el baño en una experiencia más relajante, la lavanda es una opción ganadora. Su aroma delicado y persistente genera una atmósfera similar a la de un spa, además de repeler insectos de forma natural. Con unos pocos cuidados y una maceta bonita, puede transformar por completo la energía del espacio.
Elijas una o combines varias, estas plantas demuestran que el bienestar del hogar también se cultiva. Y en el baño, un rincón muchas veces olvidado en términos de diseño, pueden marcar la diferencia entre un espacio funcional y uno verdaderamente acogedor.
