Astrología: cuál es el signo del horóscopo más vengativo y malvado de todos

Algunos signos del horóscopo se destacan de otros por ser buenos, amables o por incluso ser soñadores y alegres. Sin embargo también está la otra cara de la moneda: signos que disfrutan ver a los demás sufrir, o que incluso son denominados como vengativos y malvados.

En la siguiente nota te diremos cuál es el signo más vengativo y malvado de todos, aquel del cual tiene que tener cuidado porque puede atacarte en cualquier momento. 

¿Cuál es el signo más vengativo y malvado de todos?

El signo más vengativo de todo el horóscopo es Escorpio, ya que es intenso, misterioso y muy magnético. Las cosas se deben hacer como él quiere, sino está todo mal. Además tienen la habilidad innata para adentrarse en los secretos más oscuros de las personas.

El regente  de este signo es Plutón, el planeta de la transformación y la regeneración, lo que hace que los Escorpio sean personas capaces de renacer de sus propias cenizas.

Escorpio es un signo que ama vengarse de aquellos que le hicieron daño, e incluso suele planear una venganza fría y calculadora, sin importarles las consecuencias. Los nacidos bajo este signo también son muy leales y protectores con las personas que aman.

Si dañas a una persona que es importante para Escorpio, entonces tendrás que prepararte para un ataque, ya que cobrará venganza por mano propia. 

¿Existen otros signos vengativos?

Escorpio no es el único signo vengativo y malvado del horóscopo, ya que también podemos mencionar a:

Cáncer

Este signo es muy emocional y malvado a la vez. A simple vista parecen inofensivos, pero les gusta causar daño. Se toman las cosas muy a pecho y pueden hacerte pasar un mal rato. 

Aries

Este signo es muy ambicioso, y eso se debe a que es un signo de fuego. Tiene mucha pasión y energía, son líderes natos y todo tiene que hacerse como ellos quieren. 

Su planeta regente es Marte, el dios de la guerra, lo que les aporta una naturaleza competitiva y guerrera. Son impulsivos y agresivos, y su necesidad de control puede generar conflictos y malentendidos con los demás.