Cómo utilizar el tomate para poner en tu Árbol de Jade y que estalle de flores

El Árbol de Jade es una planta popular y apreciada por su resistencia y fácil cuidado. Aunque no requiere de demasiada atención, existen ciertos métodos que pueden ayudar a potenciar su crecimiento y estimular una abundante floración. Uno de los trucos más efectivos y naturales es el uso del tomate rojo como abono.

Floración de tu Árbol de Jade

Para preparar este abono natural, necesitas dos ingredientes comunes, tomate y agua. El primero es rico en vitaminas y minerales esenciales que son fundamentales para la salud de las plantas. Al preparar esta mezcla, estarás proporcionando al Árbol de Jade nutrientes como vitaminas A, B1, B2 y C, además de minerales como calcio, fósforo, potasio y sodio, que son vitales para estimular la floración.

El proceso para crear este abono es simple y no requiere mucho tiempo. Para comenzar, necesitarás 100 gramos de cáscara de tomate rojo y un litro de agua. Estos ingredientes se combinan para crear una solución que fortalecerá tu Árbol de Jade, promoviendo un crecimiento saludable y una floración impresionante. El tomate es clave en este proceso, ya que su composición aporta una rica variedad de nutrientes que favorecen el desarrollo de las flores en la planta.

El primer paso para preparar el abono es colocar las cáscaras de tomate rojo en un recipiente con agua y llevar la mezcla a ebullición. Deja hervir durante unos minutos para extraer todos los nutrientes del tomate. Luego, apaga el fuego y permite que la mezcla se enfríe. Una vez que esté fría, tritura el concentrado en la licuadora y cuela la mezcla para obtener un líquido suave y nutritivo. Este proceso es esencial para asegurarte de que el abono para el Árbol de Jade sea lo suficientemente fino para ser absorbido por la planta.

Una vez que hayas preparado la mezcla, guárdala en un frasco de vidrio o en un atomizador para facilitar su aplicación. Para utilizarla en tu Árbol de Jade, rocía la solución sobre las hojas y la tierra, manteniendo una distancia de aproximadamente 15 cm. Esto asegurará que la planta absorba los nutrientes de manera adecuada, sin saturarla. Es importante aplicar el abono de manera uniforme, cubriendo todas las partes de la planta para obtener los mejores resultados.