Jardinería

Cómo reproducir esquejes de geranio en septiembre para que estallen de flores

Septiembre es el mes ideal para recolectar esquejes y prepararlos para florecer con fuerza en los meses siguientes.
miércoles, 18 de septiembre de 2024 · 12:00

Los geranios son una de las plantas más queridas por su vibrante colorido y su fragante aroma, especialmente durante los meses cálidos de primavera y verano. Sin embargo, su belleza es pasajera, por lo que es importante aprovechar el momento adecuado para propagar estas plantas y asegurar su esplendor para la próxima temporada.

Truco que no debes dejar pasar

El final del verano y el inicio del otoño ofrecen las condiciones perfectas para realizar la reproducción de geranios mediante esquejes. Durante esta etapa, la planta ha completado su ciclo de crecimiento más activo, entrando en una fase de reposo que facilita el proceso de propagación. 

Estos esquejes de geranio deben tener al menos dos hojas y ser cortados con herramientas limpias para evitar la transmisión de plagas o enfermedades a las nuevas plantas. Asegurarse de la limpieza de las tijeras es crucial en este paso, ya que cualquier contaminación podría poner en riesgo el crecimiento de las futuras flores.

Geranios. Fuente: iStock.

Una vez obtenidos los esquejes, existen dos métodos principales para enraizarlos, en agua o directamente en tierra. Aunque el método en agua puede resultar atractivo, suele ser más susceptible a que las raíces se pudran. Por ello, el método más seguro es plantarlos los geranios directamente en macetas con sustrato universal. Antes de insertar el esqueje en la tierra, es recomendable hacer un pequeño agujero para facilitar su colocación y luego pulverizar suavemente el esqueje para darle humedad.

Geranios. Fuente: iStock.

Tras plantar los esquejes de geranios, es fundamental colocar las macetas en un lugar que reciba luz solar moderada, sin exposición directa a corrientes de aire. Es vital controlar la humedad del entorno, ya que un exceso de agua puede causar que los esquejes se pudran, lo que afectaría su capacidad de enraizar correctamente. El equilibrio entre luz, aire y humedad es esencial para el éxito de la propagación.