Cómo es el ritual del laurel para atraer la buena suerte a partir del primer lunes de septiembre

Desde su aparición hace varios siglos atrás, las creencias populares y espirituales se mantienen al día de hoy por las personas que desean solucionar sus problemas en base a algún tipo de fe. En ese sentido, la causa de todos los problemas se atribuye a cuestiones externas que escapan del entendimiento común a un plano esotérico. Para comprobarlo, es oportuno realizar un ritual para atraer la buena suerte con ayuda del laurel.

En los inicios de la humanidad, ante la falta de respuestas sobre el funcionamiento del mundo derivaron en la creación de mitos y creencias de un plano espiritual y mítico. Bajo esta línea es donde también surgen las religiones y las costumbres populares que tienen como fin dar respuesta a la incertidumbre del futuro cercano. Uno de los más llamativos es un ritual que, a través del laurel, promete mejorar las energías de la buena suerte.

¿En qué consiste el ritual de la buena suerte?

Por impensado que parezca, este ritual requiere de un ingrediente de cocina que suele incorporarse para un mejor sabor, hablamos del laurel. Si bien esto es muy cierto, en épocas pasadas sus propiedades se extendían a la solución de problemas médicos, como resfriados, y la atracción de la prosperidad. En este último tema, existe la posibilidad de mejorar la buena suerte a través de un procedimiento rápido y sencillo.

Elementos:

• Hojas de laurel
• Lapicera de tinta roja
• Recipiente 
• Fósforo o encendedor

Antes de realizar este ritual del laurel, es muy importante elegir un espacio silencioso y bien ventilado. Una vez hecho, es hora de ir pensando en nuestros deseos más profundos para el mes de septiembre. A continuación, lo trasladamos a una hoja de papel, escrita con una lapicera roja para simbolizar los anhelos futuros y atraer la buena suerte que tanto necesitamos dentro del hogar.

En la segunda parte del ritual de la buena suerte, prendemos una vela dentro del espacio tranquilo que elegimos. Luego, dentro de un recipiente resistente al calor, procedemos a quemar unas hojas de laurel y la hoja que contiene nuestros deseos para este mes. Por último, cuando veamos las primeras señales de humo, nuevamente imaginamos las intenciones personales. Al terminar de quemarse por completo, esparcimos las cenizas cerca de una planta y expresamos un agradecimiento especial.