Test de salud
Dime cómo es la forma de tus heces y te diré cuál es tu estado de salud
Las deposiciones pueden indicar si se sigue una dieta adecuada, si tienes intolerancias alimentarias o si hay problemas de salud más serios.El color, la forma y la textura de tus heces pueden ofrecer valiosa información sobre tu estado de salud, si te encuentras bien tu excremento será de una manera y de otra si estás en problemas. Aquí encontrarás todo lo que necesitas para descubrir más acerca de tu intestino y de tu organismo.
La Escala de Bristol
Creada en la Universidad de Bristol en 1997, clasifica las heces en siete tipos, proporcionando una guía para interpretar lo que ves en el inodoro. Los tipos 1 y 2 señalan estreñimiento, esto sugiere que el primer tipo se describe como pequeños trozos duros, similares a nueces, mientras que el segundo tipo tiene una forma de salchicha con fragmentos. Estos tipos de heces indican un tránsito intestinal lento, algo malo para tu salud.
Las heces de tipo 3 y 4 en la Escala de Bristol son las más cercanas a la normalidad, el tipo 3 tiene forma de salchicha con grietas en la superficie, mientras que el tipo 4, considerado ideal, es suave y liso, parecido a una serpiente. Este tipo de heces indica una dieta equilibrada y una buena salud digestiva.
Cuando las heces son de tipo 5, presentan trozos blandos con bordes claros y se eliminan fácilmente, sugiriendo una digestión incompleta. Las de tipo 6 y 7, que son blandas o completamente líquidas, indican diarrea. Este problema puede ser causado por diversas condiciones, como infecciones virales, síndrome del intestino irritable o intolerancia a la lactosa.
El color
Las heces de color marrón y verde generalmente se consideran normales, sin embargo, colores como el rojo, negro, amarillo o blanco pueden señalar problemas de salud. El marrón indica una digestión saludable, mientras que el verde puede deberse al consumo de muchas verduras o a un tránsito rápido por el intestino. Las heces amarillas, blancas, rojas o negras requieren atención médica, ya que pueden indicar afecciones más graves como problemas hepáticos, sangrado interno o mala absorción de nutrientes.