Rituales

Haz este ritual purificador de energías con esta piedra preciosa hasta el 30 de noviembre 2024

Aprende a limpiar tus piedras preciosas y renueva tu energía.
jueves, 14 de noviembre de 2024 · 13:10

Las piedras preciosas pueden brindarnos muchos beneficios a nivel personal. Por ejemplo hay piedras como el ónix cielo que nos brinda calma, tranquilidad, e incluso le sirve mucho a los estudiantes, ya que aclara las ideas.

Sin embargo, para que una piedra preciosa pueda brindarnos sus beneficios, debemos saber usarla. A continuación te enseñaremos a realizar un ritual purificador de energías usando las piedras preciosas.

¿Qué piedra preciosa es ideal para purificar energías?

Una de las piedras que mejor sirven al momento de purificar las energías de las personas, especialmente en los últimos meses del año, es la turmalina negra.

La turmalina negra brinda protección y purificación, y se usa desde tiempos antiguos para mejorar la energía de las personas y de los ambientes. Es un amuleto de defensa. 

Además tiene una gran capacidad para neutralizar energías negativas, equilibrar el campo electromagnético y proporcionar una sensación de seguridad y estabilidad.

¿Qué beneficios brinda la turmalina negra?

La turmalina negra es ideal para purificar los cuerpos que están en contacto constante con dispositivos tecnológicos como teléfonos celulares, computadoras, televisión, etc. 

Se dice que su principal virtud es la de actuar como un escudo protector, absorbiendo las energías densas o negativas que nos rodean. También puede ayudar a liberar bloqueos emocionales y traumas del pasado, ayudando a restablecer la armonía entre cuerpo, mente y espíritu.

La turmalina negra sirve para liberar el estrés y la ansiedad, cualidades que suelen aumentar en los últimos meses del año debido a la acumulación de responsabilidades y las festividades.

¿Cómo limpiar las energías usando la turmalina negra?

Lo que debes hacer para eliminar las malas energías es activar correctamente la turmalina negra. Para ello te aconsejamos dejar la piedra toda una noche bajo la luz de la luna. También puedes hacerlo durante el día, para que la piedra reciba toda la energía del sol.