Jardinería

Cuántas cucharadas de sulfato de hierro debes poner en tus jazmines para evitar las hojas amarillentas

En este artículo te explicamos cómo aplicar la dosis correcta para devolver el verdor a tus jazmines.
miércoles, 30 de octubre de 2024 · 21:00

Los jazmines son plantas queridas en muchos jardines, gracias a sus flores fragantes y vistosas que embellecen cualquier espacio. Sin embargo, uno de los problemas más comunes es el amarilleamiento de sus hojas, una señal de que la planta puede estar sufriendo clorosis férrica, una deficiencia de hierro que afecta su salud y apariencia. Para solucionarlo, el uso de sulfato de hierro es una excelente opción.

Esto es lo que debes hacer

La clorosis férrica es una afección común en plantas como los jazmines y se manifiesta cuando estas no pueden absorber suficiente hierro, un mineral esencial para la producción de clorofila, el pigmento responsable del color verde de las hojas. Sin hierro, empiezan a amarillear, perdiendo vitalidad y afectando la salud de la planta en general.

La dosis ideal de sulfato de hierro para los jazmines es de 1 a 2 cucharaditas, dependiendo del tamaño de la planta. Coloque una cucharadita de cada lado de la base del arbusto, a unos 3 o 4 centímetros del tronco, para asegurar que el suplemento se distribuya uniformemente y no afecte directamente al tallo.

Jazmín. Fuente: iStock.

Si tienes jazmines en macetas, la aplicación del sulfato de hierro debe ser ligeramente diferente, en este caso, coloque el sulfato en los bordes de la maceta, en lugar de cerca del tronco. Así, cuando riegues, el sulfato de hierro se disolverá y se irá absorbiendo gradualmente, nutriendo a la planta sin sobrecargarla.

Jazmín. Fuente: iStock.

Para obtener resultados óptimos en la recuperación de tus jazmines, es recomendable repetir el tratamiento con sulfato de hierro una vez al mes. Esta frecuencia permite a la planta ir absorbiendo el hierro de forma gradual, favoreciendo una recuperación sostenida. Continúa aplicando el sulfato de hierro mensualmente hasta que se observe una mejora en el color y la salud general de las hojas.