Numismática
Estas son las 3 monedas que aumentarán su valor antes de que termine el 2024
Con el final del 2024 a la vista, estar atento a las tendencias del mercado y a las monedas que están ganando relevancia es clave.Si eres de los que suele acumular monedas en casa, puede que estés sentado sobre un pequeño tesoro sin saberlo. Muchas de esas piezas que pueden parecer comunes a simple vista tienen el potencial de aumentar significativamente su valor en el mercado de coleccionistas.
A medida que se acerca el final de 2024, es crucial prestar atención a ciertas monedas que podrían transformarse en auténticas joyas monetarias. Los coleccionistas están dispuestos a pagar sumas impresionantes por piezas que presentan características únicas, como errores de acuñación o que han sido descontinuadas.
Estas son las 3 más valiosas
Una de las monedas que ha captado la atención de los coleccionistas es la Media Águila o Half Eagle, una de oro antigua con un valor nominal de cinco dólares. Emitida por primera vez en 1795, esta moneda es un ícono de la numismática estadounidense. Su rareza y el hecho de ser una de las primeras acuñadas por el gobierno de Estados Unidos la convierten en un objeto de deseo para muchos. Las versiones de 1795 y 1798, en particular, han sido valoradas en cifras que rondan los 15,000 dólares y pueden alcanzar varios millones, dependiendo del estado de conservación.
Otra pieza destacada en el mundo de la numismática es la Águila Doble de Saint-Gaudens de 1933. Con un valor nominal de 20 dólares, esta moneda es célebre por su complicada historia. En un esfuerzo por retirar estas monedas del mercado, el gobierno de EE. UU. hizo un gran esfuerzo para fundirlas, lo que aumentó su rareza. Poseer una de estas monedas se considera tener en manos un tesoro invaluable; de hecho, en 2019, una de ellas fue subastada por cerca de 19 millones de dólares, lo que habla de su estatus como una de las monedas más valiosas del mundo.
Por último, el centavo de bronce de 1943 es otro candidato que promete aumentar su valor antes de que termine el año. Esta moneda es famosa por un error de producción; en lugar de ser fabricada con acero recubierto de zinc durante la Segunda Guerra Mundial, algunas fueron acuñadas en cobre. Este error ha capturado la imaginación de los coleccionistas, quienes están dispuestos a desembolsar sumas significativas por un ejemplar. En 2018, una de estas monedas se vendió en una subasta por 1.7 millones de dólares, evidenciando el interés continuo que despiertan entre los amantes de la numismática.