Plantas
Dónde no debes colocar la lengua de suegra para evitar la mala suerte, según el Feng Shui
Desentraña los cuidados esenciales que transformarán tu lengua de suegra en un tesoro radiante.La lengua de suegra, también conocida como sansevieria, es una planta que es más que hermosa. Según el Feng Shui, la disposición dentro de tu hogar puede afectar tu energía y suerte. Conozca los lugares desfavorables para esta planta mágica y descubra dónde crece realmente.
Según el Feng Shui, es importante no colocar la lengua de una suegra en el salón, ya que esta estancia suele tener muchos elementos de madera. Es fundamental encontrar el equilibrio entre los elementos para evitar conflictos energéticos que puedan anular las propiedades positivas de la planta.
El baño es un lugar húmedo, por lo que no es un ambiente adecuado para la lengua de la suegra, que requiere poca humedad. Además, según las enseñanzas del Feng Shui, el baño es considerado un lugar donde se pierde energía, lo que puede afectar las propiedades beneficiosas de las plantas y reducir el atractivo de la abundancia. Según el Feng Shui, a pesar de la búsqueda de la abundancia, la oficina no es el lugar ideal para las palabras de suegra. Aunque su energía protectora es poderosa, puede resultar contraproducente, obstaculizando la creatividad, haciéndote cuestionar tu trabajo y creando una sensación de estancamiento.
Según el Feng Shui, lo mejor es colocar la lengua de la suegra en la entrada de la casa. Aquí podrás aprovechar al máximo sus propiedades protectoras y atraer buena suerte, dinero y energía positiva. Esta disposición no sólo protege la casa de las malas vibraciones, sino que también promueve la prosperidad.
Asegúrate de proporcionar un buen drenaje para evitar que el exceso de agua pudra la planta. Acercar la lengua de suegra a la luz durante algunas horas estimula el crecimiento de nuevos tallos. Con necesidades de riego limitadas, una o dos veces al mes, la lengua de suegra es ideal para aquellos que buscan despreocuparse. Evita el suelo constantemente húmedo para prevenir la podredumbre. En invierno, un riego al mes es suficiente, mientras que en verano se recomienda regar cada 15 días. Con su tolerancia al sol indirecto, la sansevieria se adapta a diferentes condiciones de luz, convirtiéndola en la opción perfecta para aquellos que planean ausentarse durante las vacaciones.