Esta es la cantidad exacta de días que dura tu garrafón de agua antes de que se vuelva peligrosa 

Los garrafones son la forma más común de consumir agua potable, sin embargo, no siempre son la opción más saludable. La falta de higiene en el proceso de llenado o en su almacenamiento puede ser un foco de infecciones para quienes lo consumen. El uso de estos envases, en ciertas condiciones, podría representar un riesgo a la salud.

Vale mencionar que en la mayoría de los hogares existen envases de 4, 10, 19 o 20 litros de agua para el consumo doméstico. Debes conocer las señales para sustituirlos y de ese modo evitar problemas de salud. Una de las primeras cosas que debes saber es que el agua en sí misma no tiene una fecha de caducidad. 

Cuando el agua es pura y no contiene ninguna adición o contaminante, no se estropea ni se vuelve peligrosa para beber. No obstante, es preciso recordar que el líquido se puede arruinar con la presencia de microorganismos u otros contaminantes, volviéndola insegura para el consumo humano. Para saber sí debes sustituir el garrafón, se recomienda revisar la fecha en que fue fabricado. Este dato, algunas veces, puedes encontrarlo en la base del envase, súmale tres años y esa será la mejor fecha para remplazarlo.

Si acostumbras utilizar garrafones, el tiempo que puedes utilizarlos sin que afecte tu salud, dependerá de factores como la calidad inicial del agua, el método de almacenamiento e incluso las condiciones ambientales.Si este recipiente se mantiene sellado, entonces el agua conservará su calidad durante un tiempo prolongado. Recuerda tener tu envase en un lugar limpio, fresco y seco. 

Otras señales que te ayudarán a determinar si ya es tiempo de cambiar tu garrafón de agua son los siguientes: si presenta sabor u olor extraño, si el líquido tiene sedimentos o partículas o si el envase se ha expuesto a altas temperaturas. Debes estar atento a todo aquello que indique que el agua puede estar contaminada o en mal estado. En ese caso, debes cambiarlo para evitar problemas de salud.