Hogar
La planta de interior que es considerada un “aire acondicionado natural” por su capacidad de refrescar ambientes
Con esta serie de tips lograrás que tus habitaciones se mantengan frescas todo el año.La vida en épocas de calor puede ser un tanto pesada, especialmente cuando no cuentas con buena ventilación en tu hogar provocando que el aire de allí dentro se estanque. No obstante, es poco sabido que existe una planta en particular que funciona como un aire acondicionado natural refrescando las habitaciones de tu hogar y esta es la Areca.
La Areca constituye un género de plantas con flores que forma parte de la familia de las palmeras. Este género de planta comprende alrededor de 50 especies de palmas de tallo único, las cuales se distribuyen en bosques tropicales húmedos. Las arecas se encuentran entre las plantas de interior más comunes en numerosos hogares, y no es sorprendente dada su capacidad para infundir un ambiente fresco y exótico en cualquier espacio con sus hojas decorativas.
Es así que además de ser plantas tropicales son conocidas por purificar el aire en nuestros hogares. No obstante, para que la Areca aporte ese toque natural y fresco a tu casa, es crucial conocer sus cuidados. Inicialmente debes tener en cuanto su ubicación y luz colocando la Areca en un espacio luminoso, evitando la luz solar directa, ya que esto podría dañar sus hojas, por lo que la planta puede sobrevivir en áreas de semisombra.
Por otro lado debes tener cuidado en la temperatura a la que expones esta planta debido a que la Areca no tolera el frío. Evita exponerla a temperaturas inferiores a 15ºC y mantén la temperatura en tu hogar entre 18 y 25ºC para asegurar su felicidad. La humedad ambiental es crucial para la Areca ya que prospera en ambientes húmedos, así que crea una humedad adecuada y rocía sus hojas durante los meses más cálidos.
El abono de esta planta es el que la hará brillar en tu hogar y mantener el color verde vibrante. Añade abono para palmeras al sustrato, puedes utilizar restos de otras plantas en forma de composta, aplicándolo una vez al mes durante las temporadas de calor. En cuanto a su riego, asegúrate de mantener el sustrato ligeramente húmedo. En verano, riega la Areca cada dos o tres días, mientras que en invierno reduce la frecuencia, proporcionándole agua solo cuando el sustrato comienza a secarse, evitando el encharcamiento.