Perros
Estos son los 5 sonidos que más odia tu perro y no lo sabías
El oído de los animales es mucho más sensible que el de los humanos, por eso debes protegerlo de sonidos fuertes que los alteran y hasta les causan dolor.Nuestros fieles amigos de cuatro patas tienen una capacidad auditiva mucho mayor que la nuestra. Por eso, suelen percibir y reaccionar a sonidos que a menudo pasan desapercibidos para nosotros. Los sonidos fuertes pueden poner a tu perro nervioso, tembloroso o empieza a ladrar sin razón aparente. Aquí te presentamos los 5 sonidos que más odia tu perro y que quizás no sabías
Uno de estos sonidos son los estruendos de los petardos y fuegos artificiales, estos suelen ser una pesadilla para la mayoría de los perros. El estruendo repentino y los destellos luminosos pueden causarles ansiedad y miedo. Otro sonido molesto para los perros son los disparos de armas de fuego, nuestras mascotas son sensibles a los sonidos fuertes y repentinos. Estos ruidos pueden causarles un gran estrés y temor.
Las tormentas con rayos y truenos pueden ser una experiencia aterradora para muchos perros por los sonidos fuertes y los destellos luminosos pueden hacer que se escondan o busquen refugio. Los ruidos de los electrodomésticos, especialmente aspiradoras, batidoras y picadoras, aunque estos sonidos pueden parecernos cotidianos, para los perros pueden resultar inquietantes. El zumbido de una aspiradora o el ruido de una batidora pueden generar estrés.
Los perros también tienen preferencias musicales, y no suelen disfrutar de sonidos estridentes como los tambores y las trompetas. Estos instrumentos pueden causarles irritación y ansiedad. Además de estos cinco sonidos, los perros suelen tener una reacción negativa a las sirenas de ambulancias, coches de policía y bomberos. Se cree que su aversión a estas sirenas se debe a su similitud con el aullido de un perro en peligro, lo que puede generar confusión y angustia en ellos.
Para garantizar el bienestar de tu perro, es importante prestar atención a su reacción ante estos sonidos y tratar de minimizar su exposición a ellos en la medida de lo posible. Si conoces los sonidos que más odia tu perro, podrás ayudarlo a sentirse más seguro y relajado en su entorno.