Cuál es el método de los grandes restaurantes para lavar las fresas y que duren semanas frescas

Las fresas sin dudas son una de las frutas favoritas en todo el mundo ya que su dulzura y frescura ha logrado que sea una de las más consumidas. Además de ello, esta fruta es útil para múltiples preparaciones, desde licuados en verano hasta tartas frutales. Es por ello que el día de hoy te compartiremos el truco único para lavarlas correctamente y evitar contaminaciones con un elemento esencial: vinagre.

Estas frutas destacan por su elevado contenido de fibra, vitamina C, antioxidantes, potasio, ácido fólico y minerales, convirtiéndolas en una fruta de bajo aporte calórico. Consumir fresas no solo contribuye a mantener la piel bien hidratada, sino que también combate el estreñimiento gracias a su contenido en fibra. No obstante, es poco sabido la forma correcta de lavarlas e higienizarlas para su consumo y que duren más tiempo, esto es con el truco del vinagre.

Su aporte de vitamina C, junto con pigmentos como la luteína y la zeaxantina, ayuda a prevenir enfermedades oculares. Asimismo, su consumo puede contribuir a reducir problemas cardiovasculares. Para lograr una correcta conservación de las fresas, y prolongar su frescura y sabor durante semanas, gracias al truco del vinagre, es esencial lavar las fresas a fondo. Al carecer de piel o cáscara, las impurezas que puedan contener van directamente a la parte que consumiremos, por lo que es crucial que estén completamente limpias antes de ingerirlas.

Es por ello que te compartiremos un truco sencillo  para extender la vida útil de estas deliciosas frutas, permitiéndote disfrutarlas más allá de los dos o tres días posteriores a la compra. Inicialmente debes lavar las fresas y eliminar las bacterias que podrían acelerar el proceso de deterioro. Es esencial secarlas con una servilleta de papel después de lavarlas. Luego coloca las fresas en un recipiente con agujeros para facilitar la circulación del aire y evitar que se pudran rápidamente.

Posteriormente deberás guardarlas junto a un papel absorbente para captar la humedad, permitiendo que las fresas conserven su sabor, frescura y consistencia por más tiempo. El truco está en un ingrediente: el vinagre. Para ello llena un bol con agua y vinagre en una proporción de cuatro partes de agua por una de vinagre y sumerge las fresas durante aproximadamente cinco minutos. Luego de este tiempo, enjuaga las fresas con agua fría para eliminar el sabor ácido del vinagre o la sal, y sécalas con papel o un paño de cocina. Este método no solo desinfecta las fresas, sino que también te brinda la tranquilidad de consumirlas sin preocuparte por los residuos de pesticidas.