Salud

Diabetes: Se ha demostrado que dos frutos rojos potencian la sensibilidad a la insulina y reducen drásticamente el azúcar en la sangre

La diabetes está interrelacionada con una serie de otras complicaciones, muchas de las cuales se derivan de niveles anormalmente altos de azúcar en la sangre. Por lo tanto, controlar la glucosa es primordial, tanto para prevenir como para controlar la enfermedad.
martes, 22 de marzo de 2022 · 08:18

La diabetes generalmente ocurre cuando el cuerpo desarrolla una incapacidad para producir suficiente insulina o responder a la hormona.

Porque el papel de la insulina es absorber la glucosa en sangre y convertirla en energía, sin que aumenten los niveles de azúcar en sangre.

Esto puede causar daños irreversibles a los nervios y órganos si no se trata. Afortunadamente, sin embargo, la adición de dos frutas a su dieta podría controlar los niveles de glucosa en la sangre.

Según datos recientes, la carga de la diabetes crece año tras año, y el número de casos se ha duplicado en los últimos 15 años.

Una gran cantidad de factores pueden predisponer a las personas a la afección, pero cuando el estilo de vida es la causa, el ajuste de la dieta puede reducir significativamente el riesgo de desarrollar síntomas.

Ciertas frutas, por ejemplo, ayudan mejorando la sensibilidad a la insulina y favoreciendo la captación de glucosa en sangre, debido a su actividad antioxidante.

Un estudio de 2017 publicado en el British Journal of Nutritional determinó que los polifenoles derivados de los arándanos y las frutillas podrían aumentar la sensibilidad a la insulina y reducir el azúcar en la sangre.

Los datos recopilados durante el estudio indicaron que el consumo de 333 mg de polifenoles de frutillas y arándanos durante seis semanas mejoró significativamente la sensibilidad a la insulina.

Sin embargo, los autores enfatizaron que se necesitaba más investigación para dilucidar la actividad de estos polifenoles, así como estudios más amplios y a más largo plazo.

Pero los hallazgos se hicieron eco más tarde en un estudio de 2020, publicado en la revista Current Developments in Nutrition.

El ensayo aleatorizado, que se llevó a cabo durante un período de 14 semanas, estudió a adultos con síndrome metabólico que fueron asignados a uno de tres tratamientos.

Estos incluían un polvo de control, una porción de frutillas (polvo) o 2.5 porciones de frutillas (polvo).

“Los polvos liofilizados se mezclaron con agua y los participantes consumieron la mitad de la dosis diaria por la mañana y la mitad por la noche”, explicaron los autores.

Se pidió a los participantes que siguieran su dieta y estilo de vida habituales y que se abstuvieran de comer otras bayas.

Los autores del estudio señalaron: "Estos datos sugieren que consumir frutillas en 2,5 porciones diarias durante cuatro semanas mejoró significativamente la resistencia a la insulina y el perfil de partículas LDL en adultos con síndrome metabólico".

Un estudio anterior de 2008, realizado sobre la diabetes tipo 2, arrojó resultados similares y confirmó que el jugo de arándano podría ayudar a controlar el azúcar en la sangre entre los diabéticos.

Investigaciones anteriores han concluido que los beneficios de los polifenoles para los diabéticos ocurren a través de diferentes mecanismos.

Al promover la absorción de glucosa en los tejidos, se ha sugerido que los polifenoles pueden mejorar la sensibilidad a la insulina.

Al mejorar la señal de insulina, las frutas permiten que el azúcar en la sangre salga del torrente sanguíneo y llegue más rápidamente a las células.

Esto podría ayudar a reducir los niveles de inflamación en todo el cuerpo, especialmente cuando la fruta se consume dentro de las dos horas posteriores a una comida, según algunos estudios.

¿Qué son los polifenoles?

Los polifenoles son un gran grupo de fitoquímicos que se pueden dividir en diferentes tipos.

Entre otras frutas, las manzanas, las uvas, las bayas y las peras contienen algunas de las cantidades más altas de polifenoles.

Pero otras fuentes dietéticas conocidas incluyen vegetales, chocolate, té, granos integrales, legumbres secas, nueces y aceite de oliva.