Salud Mental

Cómo el discutir con extraños en Internet afecta tu salud mental

La discusión se produce para encontrar un acuerdo y eso no es precisamente lo que sucede en redes sociales con desconocidos. Todos queremos dar nuestro parecer, pero debemos buscar canales seguros y civilizados para no exponerte a gente que sólo quiere destrozarte y tiene todo para ganar.
sábado, 24 de julio de 2021 · 12:32

Seguramente conoces esa sensación de absoluto disgusto que sientes en la boca del estómago cuando lees o ves algo en las redes sociales que sabes que no es cierto, no estás de acuerdo o parece parte de una campaña deliberada de desinformación o fakenews.

Entonces, decides contribuir amablemente con un comentario. Lo siguiente que sabes es que estás en medio en una guerra de llamas de teclado discutiendo en Internet con un completo extraño.

Tu frecuencia cardíaca aumenta junto con tu molestia a medida que te desplazas y respondes a comentarios inflamatorios después de insultos, señalamientos, acusaciones y un lenguaje deshumanizador en general.

No hay absolutamente nada que puedas hacer al respecto cuando tu presión arterial comienza a hervir. 

De repente, arrojas tu teléfono con frustración al otro lado de la habitación y te preguntas por qué insistes en una interacción que no vale la pena ni le sirve a nadie. Entonces te das cuenta de que han pasado otros 30 minutos de tu vida que no puedes recuperar.

La cueva del conejo del algoritmo de Facebook te ha succionado otra vez para obligarte, a través del placer o la ira, a aumentar tu permanencia en la red social y a ver todos sus anuncios.

Discutir con extraños en Internet es tan malo para ti como experimentar el agotamiento.

Ese algoritmo negativo está destinado a mantenerte comprometido.

¿Has visto ya la película "El dilema de las redes sociales", de Netflix? Será un buen uso de tu tiempo, lo prometo.

El impacto negativo en tu salud mental es tan dañino como pasar por el agotamiento .

Debes pensar en el agotamiento como si fuera una rana, nadando felizmente en una olla de agua por la que alguien pasó y puso el quemador al máximo. La rana hierve y muere, sin tener idea de lo que realmente le sucedió

Cuando estamos agotados tensamos nuestro cuerpo al límite y de pronto, nuestro cuerpo colapsa y no nos enteramos de que nuestro cuerpo tenía un límite.

Discutir con extraños en Internet puede tener el mismo impacto en tu salud mental que el agotamiento.

Aquí hay 4 aspectos en que las discusiones por Internet nos afectan en materia de salud mental.

1. Te sientes más ansioso cada vez que estás en línea.

Tu frecuencia cardíaca aumenta cada vez que usas las redes sociales, debido a la respuesta desconocida que puede obtener tu publicación o comentario. Esta ansiedad puede provocar un aumento de la presión arterial y la frecuencia cardíaca.

Honestamente, hay suficientes acontecimientos en el mundo por los que estar ansioso. Discutir con extraños en Internet no necesita agregarse a la lista de cosas que te ponen ansioso.

2. Tu estrés aumenta.

Notarás que tienes una mecha más corta, menos paciencia y tardarás mucho menos en responder mal o cortante. 

Estás en un estado de estrés y cada mensaje que recibe tu cerebro, ya sea en las redes sociales o alguien parado frente a ti, entra inmediatamente en el área de respuesta al estrés de tu cerebro.

¡No es el mejor lugar para tomar buenas decisiones!

3. Puede acarrear insomnio

Es común reproducir conversaciones que no salieron como esperabas, en tu mente. Reproducir discusiones virtuales con extraños tendrá el mismo impacto que tiene discutir con un familiar, un amigo, tu jefe o tu pareja. Sea como sea, vas a realizar la revisión mental letra por letra y seguramente vas a volver al texto.

Estos argumentos en Internet te mantendrán en vela quitándole horas al sueño y estarás repitiendo tus respuestas y tratando de cambiar el resultado de la conversación.

Le estarás robando a tu cuerpo un valioso tiempo de recuperación que no podrás compensar jamás.

La falta de sueño te volverá los pensamientos confusos, te costará concentrarte y estarás mucho más errático de lo habitual, lo que (es muy probable) que se traduzca en errores que impacten tu vida real y conocida, así como tu entorno cercano. Estarás más irritable, y abrirás la puerta a un círculo que cuesta cerrar.

4. Desarrollas dolencias físicas.

¡Sí, es cierto! Las dolencias físicas son lo que sigue cuando terminas de estresar tu salud mental y no la cuidas.

El estrés es una causa conocida de todo tipo de dolencias físicas, como úlceras, diabetes, psoriasis, presión arterial alta, aumento de peso, bajo deseo sexual, insomnio y más.

Los descansos de las redes sociales son claves para dejar de discutir con extraños en Internet.