Esta es la miniserie basada en una historial real que destronó a 'Dahmer'

Cada cierto tiempo, Netflix se adentra en la oscura realidad de crímenes reales para crear series y películas que capturan la atención del público. Entre las más inquietantes se encuentra "El Acosador Nocturno", inspirada en la aterradora historia de Richard Ramírez, un asesino en serie que sembró el terror en Estados Unidos. Hace unos años, esta miniserie se convirtió en un fenómeno de la plataforma, manteniendo a los espectadores al borde de sus asientos.

El 28 de junio de 1984, Los Ángeles se estremeció con la noticia de un atroz asesinato. La víctima, Jennie Vincow, de 79 años, fue hallada sin vida en su apartamento de Glassell Park. Presentaba heridas de arma blanca en la cabeza, el cuello y el pecho. Lo que nadie sabía en ese momento era que este cruel acto marcaría el inicio de una serie de asesinatos perpetrados por el siniestro Richard Ramírez, quien se convertiría en uno de los asesinos seriales más buscados en los años 1984 y 1985.

¿Quién era Richard Ramírez?

Nacido como Ricardo Leyva Muñoz Ramírez en Texas en 1960, creció en un hogar marcado por la violencia. Su padre, un ex policía, lo sometía a brutales golpizas, mientras que su primo, un veterano de la Guerra de Vietnam, le mostraba imágenes perturbadoras de asesinatos y torturas. Este primo jugaría un papel importante en su desarrollo como asesino serial, enseñándole tácticas para matar con sigilo y la invasión de viviendas ajenas.

En su adolescencia, el autodenominado "acosador nocturno" se sumergió en la delincuencia, el consumo de drogas, la violación y el satanismo. Pasó de cometer robos menores a intentos de agresión sexual. Entre sus víctimas se encontraba incluso una niña de 9 años, a quien engañó y llevó al sótano de un edificio. No sería hasta 2009 que enfrentaría cargos por este crimen, gracias a pruebas de ADN que finalmente lo incriminarían.

La historia de Richard Ramírez es un oscuro capítulo en la crónica de los asesinos en serie, un recordatorio de los horrores que pueden esconderse detrás de una apariencia común. Su legado, inmortalizado en "El Acosador Nocturno" de Netflix, sigue siendo un escalofriante recordatorio de la capacidad de la maldad humana para asechar en las sombras.