De tú a tú

Arturo Guerrero cuenta cómo se convirtió en el "Padrino de La Vega"

Esta noche en “De tú a tú”, Martín Cárcamo conversó con el llamado ‘Padrino de La Vega’, don Arturo Guerrero, quien abrió las puertas de su casa para hablar de su vida.
miércoles, 5 de mayo de 2021 · 09:43

Arturo Guerrero parte por mostrar los productos que tiene en su casa: cientos de zapallos calabaza, la especialidad de la casa y 450 cajas de papas camote, entre otras cosas. Luego, le muestra la casa de su hija mayor, abogada, vive al lado de él.

Mientras conversan de Mimi, la hija de Arturo, Martín le cuenta que en ese mismo instante su hermana, Magdalena Cárcamo, está teniendo a su quinto hijo en la clínica, “está naciendo Bosco en este minuto. Quinta guagua a los 42 años”.

Arturo, que en un mes más cumple 65 años, se emociona y explica sus inesperadas lágrimas, “porque la vida es de esfuerzo. Yo soy re frágil en ese sentido, por eso me duele en el alma cuando la gente habla y habla, y trata de destruirnos a nosotros. Tú puedes conversar con mi hija, con mi grupo familiar y todo esto nos costó, nos costó harto”.

Antes de sentarse a conversar, Arturo le cuenta a las apuradas cómo conoció a su señora la “Joyita”, Clarisa Sepúlveda, que tiene casi 12 años más que él y con quien lleva 47 años de casado.

“Entonces cuando me hablan de relaciones humanas, carita de hueón. Uno de los dos tiene que ceder y yo le digo a los chiquillos, a todos los que llegan a la Vega y conversan conmigo, ‘no mandí en la casa hueón, cara de hueón no más y te van a dar Petifort mañana, noche y tarde’”, dice Arturo explicando su filosofía en las relaciones de pareja.

 

Río de Janeiro 286

Martín y Arturo se sientan a conversar en el lugar donde todo comenzó, parte contando que él literalmente nació a tres cuadras de La Vega y que sus padres son de Valle del Elqui.

Que su madre se escapó con su padre ya que ella tenía labios leporinos y no era bien aceptada en su familia.

Llegaron a Santiago para buscar mejores oportunidades, “llega a La Vega, se compró un triciclo e iba a buscar las cosas a Estación Central, el higo, los duraznos, todos los primores. Y de ahí con esfuerzo se metió a la casa de Río de Janeiro 286 donde puso el almacén y le puso el almacén a mi mamá. Ahí nació esta joyita que se llama Domingo Arturo Guerrero Cortés”.

Lo mandaron a estudiar a Antofagasta, internado, a sus 6 años, donde estaba su tío que era profesor en el norte de Chile, pero que lo echaban tanto de menos que su padre, después de un año nuevo le dijo que se quedara con ellos en Santiago.

 

El contagio de Coronavirus

Cuenta que de los ocho hermanos él era uno de los más maldadosos y revela que Jesús, uno de los ocho, falleció de Coronavirus a los 75 años y que no pudieron ir a despedirlo.

Arturo también afirma que se contagió de Covid 19, “hubo un conflicto porque querían cerrar La Vega, hubo mucha tensión y esa semana no tuve ningún problema pero yo amanecí un día sábado con una molestia aquí (garganta) y el día lunes amanecí lerdo (…) Son cinco días donde no quieres nada de nada”.

Y agrega, “cinco días en que lo único que quería era morirme. Y te empiezas a cuestionar, yo ya tengo mi edad, entonces todo lo que hice, ¿para qué lo hice? Cuando viene un bicho de mierda y te deja neutro. El infierno hecho realidad, quieres morirte”.

Dice que una vez que se recuperó empezó a vivir de otra manera, que ya no le interesa pelear con nadie y que no malgasta el tiempo.

Arturo Guerrero en "De tú a tú" / Imagen: cortesía de Canal 13

Sus inicios en La Vega y en las Juventudes Comunistas

“A mí La Vega me cautivó desde el primer día. Tú no hacías ninguna hue* y juntabas una moneda. Calcula que yo partí recogiendo hojas de apio y se las guardaba a un señor que se embarcaba para Temuco”, parte diciendo Arturo quien a los 7 años se las ingeniaba para ganar dinero en La Vega. “Y lo otro que hacía, que era una pega bien buena, fue recibir los caballos sudados”, agrega. 

Arturo cuenta que se gastaba la plata en ir al teatro a ver películas, en sándwich de mortadela y en cigarros. Recuerda que a sus 12 años pasó de militar en las Juventudes Comunistas a la Brigada Ramona Parra, “el año 72 fue la mejor brigada de Chile”.

“Me imagino que viste cosas bien fuertes”, dice Martín. “Tengo a un amigo detenido desaparecido, el Nacho. Hasta el día de hoy digo que falta un espacio de la vida que hay que analizarlo en profundidad Martín. Y todavía no nos atrevemos a analizar por qué llegamos al 73, por qué llegamos a odiarnos”, responde Arturo.

Dice que, en esa época, todos tenían sueños de cambiar el país pero que no eran personas violentas y que durante la dictadura trabajó en la clandestinidad, donde hacían reuniones en su casa. “Hoy día soy independiente pero sigo conservando las ideas comunistas, que es comunidad”, confiesa.

 

La ‘Joyita’, su infidelidad y la muerte de Abelino

Arturo dice que en su adolescencia era alegre, lacho y cariñoso, dice que las mujeres son lo más lindo que ha hecho Dios y que se vestía como Sandro para luego vestirse como Che Guevara, con boina. Tras pasar un tiempo “fondeado”, como dice él, el año 74 vio por primera vez a “la Joyita”. ¿Lo que más le llamó la atención? “Lo he dicho siempre: los pechos y la minifalda. Lo he dicho siempre y dicen que soy machista”.

Tras contar cómo conoció a su señora dice, “yo en el amor, y perdóname Martín, no le compró a nadie el ‘mira es que nos conocimos poco…’, no. El amor es un rayo de luz”. Martín le pregunta cómo se ha comportado en sus 47 años de matrimonio. Arturo Guerrero se pone serio y confiesa que sí ha sido infiel, es más, con su señora tiene tres hijas y tuvo a un hijo fuera de su relación, Abelino, quien murió a los 12 años.

El ‘Padrino de La Vega’ recuerda que cuando supo que estaba esperando un hijo con otra mujer, fue directamente donde su señora para contarle su infidelidad. Reconoce que estaba listo para hacer las maletas e irse de su casa pero que a la noche ella le dijo: “Negrito, sabes que he analizado la situación y te voy a pedir una sola cosa: este problema lo vamos a enfrentar juntos pero quiero ser yo la madrina del niño. Y así fue, extraordinaria”.

Arturo dice que Abelino, a sus 12 años, murió de un accidente mientras se columpiaba en un columpio. “La vida es extraña, por eso te digo que hoy día hay que quererse y mañana… Dame una explicación”, dice para agregar que “nunca lo olvidas. No está aquí hoy día, a lo mejor hubiera estado con nosotros a sus 33 años… No está poh”.

 

Vocero de La Vega

Arturo relata el momento cuando el Gobierno del país quiso sacar a La Vega de su lugar emblemático. Fue en ese entonces cuando asumió como vocero de La Vega. Un momento tenso donde supo jugárselas para que La Vega Central se quedara donde permanece hasta el día de hoy.

¿Qué significa para él?, pregunta Martín. “Me puse a llorar porque nunca he hecho las cosas por interés político. Me puse a llorar porque hay mucha gente que no tiene otra alternativa, a lo mejor yo la podía tener, pero hay mucha gente que no tenía otra alternativa (…) Entonces cómo no voy a ser alegre de ver que cabros que llegaron de cargador hoy día son empresarios, ¿cómo no voy a ser orgulloso?”. 

Y agrega, “La Vega entrega la esencia de lo que es la vida de esfuerzo. Y esa esencia parte porque tienes oportunidades (…) La Vega reúne esa magia -que no lo reúne cualquiera- que es al ser humano tomarlo como ser humano”.

 

Licha, la “Joyita”

Arturo Guerrero en "De tú a tú" / Imagen: cortesía de Canal 13

Martín y Arturo se levantan de donde están para ir a conversar con Clarisa, la señora del ‘Padrino de La Vega’, quien tiene 77 años. Mientras caminan, este le muestra al equipo sus cosechas que tendrá para invierno en La Vega, y cuenta que el puerro es lo que más le genera dinero. Relata que su almacén se llama “¡Xuxa! Me pasé”, nombre que se lo puso la “Joyita”,  le confiesa que la fruta que más le gusta a él es la sandía y que se considera un agradecido de la vida.

Martín se sienta en la mesa junto a Clarisa, Licha como le dice Arturo, y se sirve un ‘Causeo del arriero’ un plato del cual le hace un homenaje a su padre, que lleva queso de cabra, cebolla morada, aceituna y charqui.

Clarisa comienza diciendo que llevan 47 años juntos pero que convivieron 38 años y que por tanto no llevan tantos años de casados, “le dio por casarse porque una persona de La Vega le dijo ‘su conviviente’. De ahí él vino y me pidió matrimonio”, dice Licha quien cuenta que fue a Cuba de luna de miel.

La señora de Arturo cuenta que en la primera cita que tuvieron lo dejó plantado porque “tenía 17 años, era muy cabro chico”. Dice que desde el día en que él se quedó en la casa no se separaron nunca más para decir más adelante que, “Arturo llega a ser como hueó* de bueno. A todo le haya solución”.

Clarisa cuenta cómo enfrentó la noticia cuando Arturo le dijo que estaba esperando otro hijo fuera de la relación. Dice que a pesar de que la mayoría le dijo que dejara a Arturo, a excepción de su suegro, sabía que su pareja era una buena persona y decidió enfrentar el problema juntos para que ella se convirtiera en la madrina del niño, “nos pusimos a llorar los dos a moco tendido en la carretera”. Cuenta que se convirtió en la matrona de la madre de Abelino y que tras la muerte del niño sufrieron mucho, especialmente sus hijas.

Admite que es la mujer más feliz por estar casada junto a Arturo, “yo lo amo mucho y me siento querida y lo quiero a él como es él”. Arturo interrumpe, “la diferencia es que yo la amo, ella me quiere” para agregar que él nunca ha sido celoso a pesar de que la “Joyita” sea una mujer que le gusta gozar de la picardía y que hace reír a todos en La Vega.

Una de las cuantas anécdotas que relatan, cuentan que cuando a Arturo le dio Covid, Clarisa recuerda que ella lo amenazaba para que no se muriera y le decía, “no te vas a morir guatón cu**** si tienes que cuidarme a mí”.

Martín pone un clásico tema de Julio Iglesias, “A flor de piel”, para llenar de nostalgia a la pareja quienes recuerdan que Licha le dedicó esta canción a Arturo cuando se enamoraron, cuando eran jóvenes. “Para amar hay que atreverse a amar. El amar no tiene fronteras, no tiene acomodo, el amar es amar no más, con sus defectos y con sus virtudes”, dice Arturo.

Al final del capítulo, Martín invita a Mimi, la hija mayor de la pareja, que tiene la misma edad que el conductor del programa y se sienta con ellos a conversar. Cuenta que a sus dos meses la tuvieron que operar por primera vez y que de ahí la han operado 27 veces más, que le dijeron que no iba a caminar. Pero ha sabido salir adelante, que estudió derecho en la Universidad Católica y que además tuvo un hijo cuando le dijeron que no iba a poder tenerlo.

Arturo Guerrero en "De tú a tú" / Imagen: cortesía de Canal 13

El animador le pregunta qué puede decir de sus padres, emocionada ella dice que los quiere, “los adoro y a mis hermanas también que están en Coyhaique”.

Al final del programa, Martín interrumpe para decirle a la familia de Arturo Guerrero que su sobrino Bosco nació hace instantes, provocando los aplausos y la felicidad de los presentes.

En el siguiente link, puedes revisar el capítulo y los mejores momentos de esta noche: https://www.13.cl/programas/de-tu-a-tu

“De tú a tú”, de lunes a jueves, después de “Tele13 central”