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'LA HISTORIA SIN FIN': el autor odiaba tanto la película que quería que lo sacaran de los créditos

El autor de la novela estaba tan indignado que comentó su disgusto en conferencia de prensa y le pidió a los realizadores de la película que retiraran su nombre de los créditos ya que no quería ser vinculado de ninguna forma con el film de 1984
viernes, 28 de mayo de 2021 · 14:21

Una de las películas infantiles MÁS MEMORABLES de la infancia de quienes crecimos entre los 80/90 es "La historia sin fin" (The NeverEnding Story en su título original). La película, con unos efectos especiales increíbles para la época, capturó a los espectadores más jóvenes y les puso a volar la imaginación.

El año pasado, los fanáticos pudieron revivir la experiencia de su infancia cuando la película estuvo disponible para su transmisión en línea. 

El material de base para esta icónica película fue una novela escrita por el autor Michael Ende.

Tras el estreno de la película, Ende no tuvo reparos en hacer saber a la gente su disgusto por la adaptación. El escritor alemán ni siquiera quería que su nombre se asociara con la película.

Para quienes no conozcan la película, les podemos contar que se trata de una película fantástica de 1984 y está basada en una novela del mismo nombre. La trama gira en torno a un tímido niño de 10 años llamado Bastian. Después de huir de algunos matones, Bastian se esconde en una librería y echa un vistazo a un libro titulado 'The NeverEnding Story'.  

Dentro del libro, la Emperatriz Infantil gobierna un mundo llamado Fantasía, pero enferma. Mientras tanto, una fuerza maligna llamada La Nada amenaza la tierra, y el guerrero Atreyu tiene que encontrar la cura para la Emperatriz. Eventualmente, Bastian termina en el mundo de fantasía para ayudar a salvarla a ella y a Fantasia. 

'La historia sin fin' fue un éxito tras su lanzamiento, y las críticas de los entendidos en el séptimo arte fueron positivas en general.

La película ganó múltiples premios y generó un par de secuelas y envejeció bastante bien ya que con los años se convirtió en un clásico de la cultura popular, dejando una huella profunda en más de una generación. 

En 1979, Ende escribió el popular libro que inspiró la adaptación cinematográfica de 'La historia sin fin'. Según Book Reports, el autor nació en Alemania el 12 de noviembre de 1929. Murió el 28 de agosto de 1995, a la edad de 65 años. Su padre era un artista famoso cuyo trabajo fue considerado inapropiado por el Tercer Reich.  

A una edad temprana, Ende desarrolló un amor por la literatura. Se convirtió en actor profesional al principio de su carrera y escribió su primera novela en 1960 mientras viajaba. Era un libro para niños titulado Jim Button and Luke the Engine Driver (Jim Botón y Lucas el maquinista). Otras obras incluyen The Spoilsport y A Very Short Fairytale (Un cuento de hadas muy corto). 

Como cualquier adaptación, la película 'La historia sin fin' se diferencia del material original en varios aspectos.

En el libro, el mundo místico se llama Fantástica, que la película cambió por 'Fantasía'.

El personaje tiene que atravesar dos puertas para obtener el Oráculo en lugar de las tres en la película. La adaptación también muestra a Bastian volando por la ciudad de Nueva York a lomos de Falkor. 

Michael Ende odiaba la adaptación de 'The NeverEnding Story'

No es raro que las adaptaciones cinematográficas disgusten a los autores originales.

Según BuzzFeed, Ende odiaba absolutamente la versión cinematográfica de 'La historia sin fin'.

El escritor afirmó que los cineastas crearon el guión sin su permiso y calificó la película de "repugnante".

Los fanáticos que lean el libro pueden entender por qué Ende tenía sentimientos tan fuertes.

Después de todo, la película solo cubre la mitad del libro, dejando de lado una parte completa. Es probable que los temas y originales no se tradujeran a la pantalla grande como hubiera querido Ende.

El odio fue tan fuerte que pidió a los realizadores que eliminaran su nombre de los créditos.

Durante una rueda de prensa, Ende explicó sus opiniones expresando: “Mi existencia moral y artística está en juego en esta película”.