Teleserie

'Dama Y Obrero' César Sepúlveda reveló cómo se grabó el desenlace: "Tuve que saltar desde un acantilado... Fue Tremendo"

Tras el final de "Dama y Obrero" la tarde de TVN continúa con la emisión de "El Circo de las Montini", y "Romané" para luego dar paso a "Carmen Gloria a tu servicio", "Noticias 24" y la teleserie "Moisés" previo a "24 Horas Central". 
lunes, 22 de marzo de 2021 · 19:03

Este lunes TVN emitió el último capítulo de “Dama y Obrero”, ficción que mantuvo la tensión hasta el último minuto de mano del gran villano de la teleserie Tomás Ahumada, interpretado por el actor César Sepúlveda. 

Esta última emisión que fue entre las 16.20 y las 16.42, alcanzó una alta sintonía con un rating online promedio de 8.2 puntos, logrando quedarse así con el segundo lugar y llegando a marcar peaks de 10 puntos. Mientras que durante el mismo horario CHV marcó 7.5 unidades, Mega 12.9 y más atrás Canal 13 3.9 puntos. 

El capítulo final terminó mostrando a Engracia encerrada en un manicomio. Mientras tanto, Julio e Ignacia lograron quedarse juntos y se prometieron amor eterno teniendo así un final feliz. Sin embargo, el malvado personaje Tomás Ahumada, tuvo un trágico desenlace.

Arquitecto y dueño de la compañía donde trabajaban Julio e Ignacia, quien antes fue su prometida, Tomás nunca pudo superar la ruptura de su relación y se transformó en un antagonista de tomo y lomo durante toda la historia. Pero aun con todas las muertes a su haber, en la emisión final, tras haber secuestrado  a Ignacia, Tomás terminó recapacitando y le pidió perdón a la pareja antes de lanzarse por un barranco. Una potente escena de la cual el actor reveló detalles desconocidos. 

“En la última escena donde aparezco en la teleserie, el director me hizo tirarme al vacío. Estábamos grabando en el cementerio de Zapallar y tuve que saltar desde un acantilado y abajo sólo me esperaban dos compañeros con unas ‘colchonetitas’ ¡Fue tremendo!", reveló el actor. 

Anteriormente César también había anunciado que el personaje de Tomás en "Dama y Obrero" le abrió muchas puertas, ya que después lo comenzaron a llamar de distintas producciones para encarnar otros antagonistas. Además, confesó que fue tal la carga emocional de su rol que "cuando grabamos la última escena de mi personaje, me quedé tres días en la casa de una amiga en Zapallar haciendo un retiro espiritual, recuperándome de esa intensidad de malo, fue súper agotador. Me dediqué casi como tres días a mirar el mar", aseguró. 

Y agregó que “cuando más troté en mi vida fue cuando hice este personaje, porque tenía que sacarme esa carga emocional y psicológica que me dejaba, fue un desgaste súper grande”.