Paranormal

5 señales de que podrías vivir en una "CASA CARGADA" y qué hacer al respecto

Hasta cierto punto, una casa embrujada es cualquier casa que tenga más energía negativa que positiva. 
sábado, 26 de septiembre de 2020 · 11:08

Una casa maldita, encantada o embrujada es mucho más común de lo que imaginas. 

Hasta cierto punto, una casa embrujada es cualquier casa que tenga más energía negativa que positiva

La mayoría de las casas están "malditas" hasta cierto punto, pero algunas lo están o afectan más que otras. 

Aquí hay 5 señales de que podrías estar viviendo en una casa cargada:

1. Puedes sentir intuitivamente que algo está un poco mal

Generalmente hay zonas o espacios de la casa que, -a pesar de que es agradable, linda, tiene buena vista, etc.- te dan escalofríos. Pasar por ahí realmente se siente raro. Puede ser el dintel de una puerta, una ventana en particular, una habitación entera. No puedes explicar la sensación, pero es como si fuera más eléctrico, más frío o más "pesado". También puede haber zonas que te den dolor de cabeza cuando pasas por ahí. 

Lo primero que tienes que hacer es pasar un aparato que capte señales electromagnéticas y ver tus instalaciones eléctricas. También debes revisar por dónde pasan las cañerías y el material del cual están hechas (para encontrar respuestas racionales posibles a sensaciones térmicas o eléctricas). Revisa además la disposición de las ventanas para ver si se forman corrientes de aire. Eso lo puedes hacer con un incienso y ver la dirección del humo. Todas esas medidas te van a llevar a concluir si se trata o no de un fenómeno paranormal.
 

2. Otras personas han vivido en la casa.

Cuando la gente ha vivido en la casa antes que tú, dependiendo de si tuvieron más experiencias positivas o negativas en esa casa, es más probable que tenga energía negativa que si fueras la primera persona en habitarla. La energía emocional contiene una frecuencia que se puede sentir en el estado de ánimo de la casa

¿Te has fijado que cuando hay una pelea el "ambiente se corta con cuchillo", todo está tenso, y el ambiente se enrarece? Lo mismo ocurre cuando entras a un lugar donde todos están contentos, hay música agradable y los dueños de casa se ve que se quieren mucho. Esa "buena onda" se siente.

Esas energías, cuando están encerradas se "adhieren" a las casas y si no eres el primer habitante de ese hogar, entonces quizás sea momento de preguntarse cómo lo pasaron ahí los habitantes anteriores: ¿Se fueron por deudas? ¿Alguien los perseguía? ¿o se fueron por viaje?

Para equilibrar la energía de tu hogar, vas a requerir de tiempo y voluntad de "pasarlo bien". Vas a tener que intencionar lindas experiencias en esa nueva casa para que tus propias energías vayan balanceando las anteriores.

También te recomendamos que "campanees la casa". Consigue una campana de bronce (si ya tienes una tanto mejor) y que pases haciendo sonar la campana por toda tu casa. Las ondas sonoras de las campanas son tan densas y fuertes, y puras, que ayudan con la limpieza en ese mismo "campo" o espectro.

3. La casa es vieja.

Las casas y los edificios antiguos tienen inherentemente más energía negativa. Cuanto más antigua sea la casa, más problemas energéticos tendrá. Más problemas se pasaron en ella (La vida no es fácil). Esto se debe tanto al punto 2 como a razones físicas. Podría haber hongos y moho, o materiales en descomposición, plagas de insectos u otros problemas que sean sintomáticos de que la casa no está en buenas condiciones materiales. 

Las casas nuevas siempre tienen mejor energía por razones obvias, por lo que si estás buscando arrendar o comprar un lugar, lo mejor es una ubicación nueva o remodelada.

Pero sabemos que no es fácil así que, si ya estás en lo que estás, entonces trata de solucionar la mayor cantidad de problemas "estructurales" de tu nuevo hogar. Una vez más, revisa las cañerías, si las llaves tienen goteras que puedan humedecer muros o pisos, o muebles. Cambia ventanas rotas y fumiga tu casa por eventuales plagas (hormigas, moscas, cucarachas, arañas, etc). Si hay hongos en el baño, entonces concéntrate en eliminarlos.

 

4. Ha perdido a alguien que amaba

Las pérdidas de seres amados son un problemazo en términos energéticos. No por el que partió sino por los que quedan y ese dolor incontenible que se vuelve físico y tangible a través de la ausencia. El mismo espacio se presta para que el recuerdo queme como cal en una herida. Y ese dolor irá cargando cada vez más la casa hasta que el sólo hecho de entrar en ese espacio se vuelva asfixiante. La única forma de evitar todo esto es que aprendas a lidiar con el dolor. Que vivas un duelo saludable; que no te aísles y que tus redes de apoyo sean eficientes. Vas a necesitar resolver los recuerdos que tuviste con esta persona para que sus recuerdos y asociaciones con ella sean lo más positivas posibles. Sólo entonces esa oscuridad se va a transformar en luz y la tristeza en amor.

Si es necesario buscar ayuda profesional para solucionar, no dudes en hacerlo.

5. Alguien ha muerto o ha estado enfermo en la casa.

Cuando alguien ha muerto o ha estado gravemente enfermo en la casa, la energía será particularmente mala debido a todo el dolor, la tristeza y el sufrimiento que podría haber estado presente. Asegúrate de remodelar una casa después de que alguien muera para limpiar la energía. Idealmente, pinta los muros de otro color.

Si vives en una casa "embrujada" o con malas vibras y no puedes mudarte, te recomiendo encarecidamente que mantengas el orden. Que  hagas limpiezas constantes con sahumerios o inciensos, que permanentemente enciendas velas blancas (bajo estricta supervisión y cuidado y con las medidas de seguridad correspondientes) y que pases la campana, al menos una vez por semana. Esfuérzate por mantener un buen clima en tu hogar y, si las situaciones desagradables permaneces, entonces recurre a alguna autoridad que represente a tus creencias, es decir, si eres evangélico, entonces a un pastor; si eres católico, entonces a un sacerdote, etc. para que puedas obrar con la ayuda de tu creencia en su máxima expresión.