Entrevista

“Siempre hay un chileno”: el programa que permite soñar en medio de la cuarentena

Hablamos con Marcelo Kiwi, director general del programa y voz en off del programa, buscando indagar en esta cuarentena, en su tremenda experiencia de recorrer el mundo para ser un testigo privilegiado sobre la vida que llevan los compatriotas que han decidido ser migrantes en latitudes lejanas.
viernes, 17 de julio de 2020 · 16:13

“Siempre hay un chileno”, el programa que va cada sábado a las 17 horas por las pantallas de Canal 13 y el cual muestra historias de compatriotas alrededor del mundo, ha cautivado fuertemente a la audiencia: es líder absoluto en su franja.

Desde el 7 de marzo hasta el 27 de junio, el espacio perteneciente a “Cultura Tarde” del 13 acumula 9,1 puntos de rating, mientras que en el mismo período y horario, TVN tiene 4,6 unidades, Mega 6,8, Chilevisión 7,0 y La Red 0,8 puntos. Además, durante cada emisión el hashtag #Siemprehayunchileno es Trending Topic.

“Creo que el programa conecta tanto con la audiencia por la manera en que lo realizamos. Lo que ves es lo que pasa en la realidad, es como cuando un amigo te viene a ver y lo sacas a pasear”, destaca a Terra Marcelo Kiwi, director general del programa y voz en off de éste, quien añade que “nos hacemos bien amigos de los participantes y creo que eso traspasa la pantalla”.

Kiwi, un chileno fanático de los viajes y que en la actualidad vive en Barcelona, pone énfasis en que “hemos sido capaces de crear un relato muy espontáneo y que es innovador para la televisión actual donde todo está basado en los rostros. En nuestro programa el participante es lo más importante. Y los chilenos que están viviendo fuera de Chile lo agradecen mucho, es una manera de poder conectar con Chile. Porque por mucho de que estén viviendo afuera, su corazón está siempre dividido”.

Consultado porqué piensa que en pandemia y cuarentena la gente quiere ver más aún este tipo de programas, una de las mentes detrás de “Siempre hay un chileno” responde que “es imposible negar que la pandemia nos ha ayudado a subir el rating porque la gente está más en sus casas, sobre todo los sábados por la tarde, pero también ha pasado que la audiencia ha conectado con las historias de los chilenos y con ese anhelo de volver a viajar aunque sea por la televisión. También pasa que en un momento como éste, muchos se cuestionan si les gustaría irse a vivir a otras latitudes del mundo”.

¿Qué mensaje le darías a las personas que aman los viajes y que este 2020 han debido dejar eso stand by?

A los amantes de los viajes como yo, lo único que podría recomendarles es que tengan paciencia y que ya podremos desquitarnos viajando. Ojalá siempre con responsabilidad y cuidando este planeta, que es el único que tenemos. Esto ya va a pasar y podremos reencontrarnos con nuestros seres queridos y con ese sentimiento tan especial que es viajar y descubrir un mundo distinto.

Chile es un país que se ha visto sujeto a recibir migrantes la última década; sin embargo este es un fenómeno reciente en nuestro país; sobre todo en regiones y no son pocos los migrantes que han acusado maltrato, racismo, explotación laboral, etc. ¿Cómo ves que se sienten los chilenos en el extranjero y cuáles son las principales dificultades a las que se han enfrentado de forma transversal?

-Los más de 128 chilenos que hemos entrevistado en el mundo se sienten muy integrados en los lugares en donde viven. Son muy pocos los que nos han contado de discriminaciones. Ahora, siendo chilenos siempre serán extranjeros adonde se fueron a vivir y tendrán que adaptarse a las costumbres de ese lugar.

¿Qué característica identitaria es la que no se pierde en el chileno migrante? (pienso, el chileno tiende a adoptar muy fácil los acentos extranjeros y somos una cultura muy maleable a todo lo foráneo)

-Así como hemos entrevistado chilenos que adoptan el acento español o inglés, también hemos entrevistado a chilenos que han vivido durante más de 40 años en los lugares a los cuales decidieron emigrar y todavía hablan como cualquier chileno común y corriente. Creo que depende más de la persona que de cómo somos los chilenos. Lo que sí es transversal en todos los chilenos que hemos grabado es la calidez con la que nos reciben… el chileno es buena gente y querendón. Después de cada entrevista que hacemos quedamos muy amigos de los participantes, y no sé si eso pasaría si estuviéramos hablando de un programa de alemanes por el mundo, por ejemplo. Otro rasgo de los chilenos es que somos muy busquillas y tenemos más flexibilidad para adaptarnos a las distintas situaciones.

 "Siempre Hay Un Chileno" de Canal 13
 "Siempre Hay Un Chileno" de Canal 13

¿Qué país parece más lejano o disímil en términos culturales a Chile en los siguientes aspectos?:

  • Desplazamiento público:

Filipinas. Ir de cualquier punto a otro en la capital de Filipinas, Manila, puede tomar, por lo general, más de una hora. Son trayectos cortos que toman una eternidad. Jorge, uno de los participantes que entrevistamos en Manila, nos contó que había pasado más de 4 años en un auto desde que había llegado si sacaba un promedio de las horas que pasa arriba de un auto.

  • Democrático:

Dinamarca es un ejemplo de una democracia que funciona muy bien. Los parlamentarios son gente sencilla que llega en bicicleta a legislar. Dinamarca es un estado de beneficios y deberes. Los impuestos que se pagan ahí son muy altos.

  • Religioso: En materia de libertades (de expresión, de género -en cuanto a manifestaciones públicas de afecto, por ejemplo en parejas homo-, económica, etc).

Con respecto a la religión, uno de los lugares que más nos ha llamado la atención fue cuando grabamos en Marruecos. Justo nos tocó estar ahí para el mes de Ramadán, donde las personas tienen que ayunar obligatoriamente por más de 40 días. Lo único que estaba abierto era un McDonald's y solo podías comer en el interior si eras turista.

  • Seguridad: (Por ejemplo en México, los mismos ciudadanos te dicen que no confíes en la policía y que si tienes algún problema, que recurras a tus amigos y en Perú, los policías andan en pequeñas tanquetas y fusiles en la mano, lo que se ve un poco amenazante).

En China nos tocó presenciar el nivel de seguridad que hay en sus ciudades y la tasa de delitos y crímenes es muy baja porque hay un férreo control del Estado. Hay miles de cámaras en todos los lugares observando qué es lo que la gente hace.

  • Laboral: (En EEUU por ejemplo, las jornadas laborales son más cortas y no es nada extraño que los latinos y afrodescendientes tengan 2 o 3 trabajos, mientras que acá es casi impensable por las largas jornadas y lo precarizados que son en materia de condiciones).

Cuando estuvimos grabando en Japón nos llamó mucho la atención la cultura del trabajo de los japoneses. Es uno de los países donde más horas se trabajan al año y es común ver a gente de traje y corbata durmiendo en el Metro.

  • Educación: (en México, Argentina, y tantos otros países la educación universitaria es gratuita y se nota en el cotidiano: en la forma en que se expresa la gente, en lo llenas que se ven las librerías, etc.)

Un buen contraste con Chile es Corea. Cuando estuvimos grabando en Seúl, todos nuestros entrevistados coincidieron en lo importante, lo exigente y lo extenuante de la educación en Corea. Las jornadas son larguísimas, y los estudiantes, además, realizan actividades obligatorias después de clases. Es tal el nivel de exigencia que hay una alta tasa de suicidios de jóvenes en Corea.

  • Salud:

Estuvimos grabando en Kenia a voluntarios chilenos trabajando en salud y fue muy impactante ver en las condiciones en que tenían que trabajar, eran muy duras. También hemos estado grabando en lugares como España, donde la salud es gratuita universal y de calidad.

¿Cuál crees que ha sido la principal motivación de los chilenos para migrar?

Las razones por las cuales nuestros compatriotas deciden emigrar son múltiples. Muchos de los que hemos entrevistado lo han hecho siguiendo el amor… diría que la mayoría. Otros han partido a estudiar y han terminado quedándose en los lugares adonde fueron. También están los que deciden partir de Chile para buscar mejores opciones laborales; esos chilenos son súper aperrados y, en general, les va muy bien y son reconocidos en los lugares en donde están ahora.

¿Es verdad que el racismo se cura viajando? ¿Se ve mayor tolerancia y flexibilidad moral en los chilenos migrantes? 

No sé si el racismo se cura viajando, pero de lo que sí estoy seguro es de que se te amplia el horizonte al estar en contacto con distintas culturas… te das cuenta de que el mundo es mucho más variado y grande de lo que pensabas y aprendes mucho.

¿Qué cualidades debe tener el chileno que toma esa decisión; qué es lo que hay que estar dispuesto a dejar atrás y a aprender? ¿Quién puede considerar una opción de esa envergadura?

Cualquiera de nuestros compatriotas es capaz de emigrar. En los más de 128 participantes que hemos entrevistado, hay de todas las edades y clases sociales. Lo primero, para poder hacerlo, es tener las ganas y dar el salto. Ese salto por supuesto que conlleva ganancias y renuncias. Vas a ganar en experiencia y ver de qué eres capaz. Pero vas a tener que renunciar al día a día de la familia y los amigos. Van a ser muchos los cumpleaños, matrimonios, Navidades o Años Nuevos que vas a pasar lejos de tu familia. Eso hace que se pierda el día a día, aunque con las nuevas tecnologías eso se hace un poco menos difícil. Y muy importante de decir es que quienes decían emigrar van a tener que adaptarse al lugar al que están yendo, porque ese lugar no se va a adaptar a ellos. En algunos casos tendrán que aprender un idioma distinto, distintas maneras de trabajar y distintas formas también de relacionarse.

Considerando que viajar no es una opción por materia económica para muchos chilenos, como para poder ir, ver, conocer y luego decidir migrar entre una variedad de países, de todos los lugares que has recorrido -si tuvieras que tomar esa alternativa de vida por razones ficticias (esto es un supuesto)- ¿Dónde recomendarías migrar y por qué?

No me atrevería a recomendar un lugar, lo que si recomendaría y le recomiendo a mucha de la gente que nos escribe a nuestra cuenta de Instagram es ver qué es lo que tengo más cercano y dónde tengo más posibilidades de adaptarme con mayor facilidad. Por ejemplo, si tengo menos de 30 años podría ir a un working holiday, y si tengo doble nacionalidad podría intentar ir a ese lugar. También es bueno enfocarse en países en los que sí están buscando a inmigrantes. En el fondo, hay que tratar de buscar un lugar en donde la burocracia para poder llegar sea la menos posible. Y para aquellos que no pueden viajar, hay mucha información en Internet a la cual pueden recurrir y también hay grupos de chilenos en las distintas ciudades del mundo donde se puede obtener información y ayuda para poder ir a vivir a esos lugares.

¿Cómo ves y qué es lo que más rescatarías de los chilenos que se van a probar suerte por el mundo?

Los chilenos que se van a probar suerte por el mundo las hacen todas. Son aperrados, súper sociables y abiertos a nuevas experiencias. Llevamos más de 128 chilenos grabados en el mundo y puedo decir que tengo 128 amigos nuevos. Ahora, todos, más o menos, extrañan Chile, es el lugar donde se encuentran nuestros afectos. Por eso la pregunta qué hacemos al final de cada entrevista no es trivial, es más bien algo que todos los chilenos que viven fuera de Chile se viven preguntando (si volverían a vivir al país).

 "Siempre Hay Un Chileno" de Canal 13

Sobre la experiencia de realizar un programa de estas características, Marcelo nos cuenta lo siguiente:

Este es un proyecto de guerrilla que realizamos solo 5 personas en total: una investigadora que busca chilenos en los lugares adonde queremos ir; un montajista que es muy talentoso y entiende muy bien cuál es el sentido de humor de la serie; un postproductor de video que corrige color, gráficas y hace la entrega final; y Juan Eduardo (productor) conmigo. Nosotros dos somos los showrunners, somos amigos hace 15 años y hemos hecho varios proyectos para televisión. Aquí nos dividimos las tareas en dos: yo soy el director y también veo la logística de los viajes, mientras que Juan Eduardo es el productor, es quien coordina con los chilenos para ver en qué día podemos grabar y también ve a qué lugares podemos ir. En terreno nos dividimos también en dos labores: yo voy haciendo la cámara y llevando la historia y Juan Eduardo graba el sonido y produce en terreno. Cuando estamos grabando tratamos de pasar lo más desapercibidos posible.

Cada capítulo que grabamos nos toma una semana. 

A los chilenos que salen en el programa los conocemos, por lo general, el mismo día. Al principio todo es un poco raro porque nos venimos conociendo, pero después de la primera hora es como si nos conociéramos de toda la vida

Cuando grabamos lo pasamos súper bien. Hacemos el ejercicio de olvidarnos por un minuto que estamos haciendo un programa de televisión y tratamos de ponernos en el papel de un amigo o familiar que está yendo a ver al chileno que vamos a grabar.